El transporte público también se ha visto afectado en itinerarios por obras del Corredor Vial Sureste
El Siglo de Durango
Desorden generalizado en la ciudad es lo que han provocado las obras del Corredor Vial Sureste, debido a que las dependencias involucradas en el proyecto no se ponen de acuerdo y afectan gravemente a la población con su descoordinación.
Así lo denunció Raúl Medina Samaniego, dirigente del Sindicato de Chóferes de la Alianza de Camioneros, quien lamentó que las autoridades hagan desvíos espontáneos en calles y avenidas sin siquiera avisar a la ciudadanía.
Dijo: ?las autoridades no hicieron nada adecuadamente y ahora estamos sufriendo las consecuencias. Tratan de justificarse diariamente. Yo veo que la Secretaria de Obras Públicas se justifica todos los días sin saber cómo están las cosas en la calle?.
Por su parte, el director general de Transportes del Estado, Rosauro Meza Sifuentes, reconoció que sí ha habido una serie de quejas y reclamos de parte de las organizaciones de transporte público que se ven afectadas en sus itinerarios por las obras de los flujos continuos en esta ciudad.
Sin embargo, el funcionario dijo que sobre todo impera la conciencia entre los dirigentes choferiles, toda vez que ellos entienden la importancia que tendrá, ya puesto en marcha para el uso de la ciudadanía, el Corredor Vial Sureste.
Un recorrido hecho por este diario en las zonas de mayor conflicto vial evidenció la desesperación que impera entre los automovilistas, quienes muy tarde se tienen que dar cuenta de que una vialidad cambió en cuanto al sentido de circulación, o de que otra más fue cerrada al paso vehicular.
RECLAMO
?De repente abren vialidades y de pronto las cierran; un día las calles tienen un sentido de circulación y luego lo cambian sin avisar. Sí molesta mucho a la gente, y en nuestro caso molesta al usuario del transporte público?, agregó Raúl Medina.
Explicó que las obras del Corredor Vial Sureste nunca fueron planificadas de manera integral por las dependencias estatales o municipales, ya que han abierto vías alternas que no estaban preparadas para recibir el aforo vehicular que ahora soportan.
Tal situación, puntualizó, ha causado que pavimentos en relativamente buen estado se dañen a niveles degradantes en perjuicio de los vehículos y camiones de ruta que deben atenerse a esas pequeñas calles, pues son la única alternativa de comunicación vial entre los asentamientos del Sur y la Zona Centro de la ciudad.
Medina Samaniego indicó que molesta sobremanera la descoordinación de las dependencias gubernamentales, ya que para los habitantes de la zonas Sur, Sureste y Suroeste las obras del Corredor Vial representan un incremento del 200 por ciento o más en los tiempos de traslado a sus trabajos o escuelas.
?Ojalá haya una real coordinación, porque esto apenas empieza; dice Secope que van a terminar en diciembre las obras del Corredor Vial, pero será en diciembre del año que entra porque están pésimos los trabajos y no avanzan?, agregó.
El dirigente choferil concluyó con la exigencia en nombre del Sindicato de Alianza, en el sentido de que las autoridades se pongan de acuerdo ?todas?, pues la ciudadanía ?no se merece que las dependencias estén improvisando en perjuicio de la población?.
ES NORMAL
Rosauro Meza Sifuentes, titular de la Dirección de Transportes del Estado, reconoció que ?ha habido inconformidades por cambios de itinerarios y porque se han empalmado rutas que antes no se empalmaban?.
Pero, agregó, yo creo que ha habido en ese sentido más conciencia y han entendido que son modificaciones temporales a las rutas, y que una vez concluidos los trabajos del Corredor Vial Sureste, pues será también en beneficio de ellos mismos.
Meza dijo que la Dirección a su cargo ha intervenido con las organizaciones inconformes para tratar de resolver el conflicto y llegar a acuerdos entre las partes, lo cual muchas veces implica acordar el trazo de las rutas junto a las organizaciones de transporte.
Agregó que las rutas más vulneradas a causa de las obras del Corredor Vial son Huizache-Camionera, Huizache-Plazuela Baca Ortiz, así como el itinerario que cubren los microbuses de la Unión de Transportistas Benito Juárez.
Y mientras tanto, la desesperación se agudiza porque las filas del desinformado tráfico vehicular se alargan en las horas de mayor movilización de automotores.
Sin embargo, la esperanza es que ya pronto se concluya con al menos una de las tres obras que comprenden el Corredor Vial Sureste para que pueda agilizarse la circulación.
Mientras tanto, hay que esperar.
DESESPERACIÓN GENERALIZADA
La gente quiere creer que la promesa será real. Sin embargo, son pocos los que confían en que la tortuosa peregrinación acabará para noviembre o diciembre, como lo asegura la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas del Estado (Secope).
Es necesario situarse en calle Nazas esquina con bulevar Circuito Interior, para darse cuenta de lo complicado que es trazar el camino hacia colonias aledañas a las oficinas de la Secretaría de Educación del Estado, ubicadas por bulevar Domingo Arrieta.
Y es que un conductor promedio buscará la ruta tradicional siguiendo por Circuito Interior hasta llegar a bulevar Instituto Politécnico, para dirigirse hacia Domingo Arrieta y por esta avenida circular de norte a sur hasta las colonias y asentamientos cercanos a la SEED, como el fraccionamiento Domingo Arrieta o la colonia Asentamientos Humanos.
Sin embargo, se va a topar con que las obras periféricas al Multimax no dan oportunidad de seguir la ruta normal, y por eso hay que rodear por el fraccionamiento Real del Mezquital, donde ya se ha modificado más de una vez la vía alterna a ofrecer al automovilista, debido al daño causado al frágil pavimento del fraccionamiento.
Se reincorpora así a bulevar Instituto Politécnico, pero si el conductor quiere cortar el camino para dirigirse a bulevar Domingo Arrieta a través del fraccionamiento Camino Real (frente al CBTIS 130), se encontrará con que ya no hay paso. Por eso debe buscar otra vía alterna como pueda, pues no hay señalamientos.
Toma finalmente calle Talpa y cruza toda la colonia Jalisco por esa arteria. Sin embargo, si con la intención de llegar más rápido quisiera cortar por la avenida que divide a los fraccionamientos Granja Graciela y SAHOP, ni lo intente: se topará con la prohibición de los tránsitos.
Así de complicado es el peregrinar de más de 40 mil automovilistas que a diario tienen que cruzar un laberinto para ir a su trabajo, para desarrollar sus actividades o para regresar al hogar.
