DESPREOCUPA AL PAÍS POSIBLES SANCIONES.
El gobierno iraní insiste en que la producción de la planta es sólo para uso de energía nuclear con fines pacíficos
Madrid, (Notimex).- Irán reanudó hoy las actividades nucleares en la planta de Isfahan, centro del país islámico, pese a las advertencias del fin de las negociaciones y el envío de su caso al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para posibles sanciones.
"Irán reinició la conversión de uranio bajo el control de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA)", declaró el vicepresidente de la Organización Iraní de Energía Atómica, Mohammad Saidi, a la prensa en Isfahan.
Las actividades nucleares iraníes se reanudaron después de que inspectores de la AIEA llegaron a la planta de Isfahan, donde colocaron nuevas cámaras de control y vigilancia antes de que Teherán retirara los sellos y reiniciara el trabajo bajo supervisión.
La producción
La central de Isfahan transforma el uranio bruto extraído de las minas del desierto iraní, en tetrafluoruro (UF4) y luego en hexafluoruro de uranio (UF6).
Esos gases son luego introducidos en centrifugadoras para producir uranio enriquecido, el combustible necesario para el funcionamiento de las centrales nucleares civiles pero también para fabricar bombas atómicas.
Reunión de emergencia
La decisión de reiniciar las actividades en la planta de Isfahan motivó una reunión de emergencia del organismo de la ONU que vigila la actividad nuclear en Viena, programada para el martes.
"No vamos a especular sobre el resultado de esta reunión", dijo un portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores británico.
"Sin embargo, nuestra posición es bastante conocida (...) si Irán reinicia alguna parte de sus actividades de enriquecimiento de uranio, incluyendo Isfahan, esto sería una falla al acuerdo de París firmado en el 2004", añadió.
Irán dijo no estar preocupado por eventuales medidas.
El gobierno iraní insiste en que la producción de la planta es sólo para uso de energía nuclear con fines pacíficos, pues necesita desarrollar energía nuclear como fuente alternativa para satisfacer la creciente demanda de electricidad.
Rechaza propuesta de la troika
La troika europea (Alemania, Francia y Reino Unido) presentó el viernes pasado a Irán una nueva propuesta para solucionar la crisis nuclear, pero advirtió a Teherán que si continuaba adelante con su intención de reabrir la central de Isfahan, interrumpiría el diálogo.
Irán rechazó la propuesta europea que incluía incentivos económicos y políticos, desafiando a la comunidad internacional de enviar su caso al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, lo que Teherán considera que sería ilegal.
El trío de países europeos convocó para mañana martes una reunión de emergencia de la Junta de Gobernadores de la AIEA, en Viena, Austria, para discutir la decisión iraní de reanudar sus actividades en Isfahan.
Tras largas negociaciones con Alemania, Francia y Reino Unido, Irán suspendió sus actividades de enriquecimiento de uranio en noviembre pasado para allanar el camino de las conversaciones con la troika europea y evitar ser denunciada ante el Consejo de Seguridad.
Analistas internacionales interpretan la nueva actitud desafiante de Irán como una estrategia para conseguir forzar las negociaciones y alcanzar mejores contrapartidas por el abandono final de sus planes nucleares.
