Deben ahora disponer la realización de exámenes psiquiátricos al ex dictador, para establecer si está o no en condiciones de afrontar un juicio.
Santiago de Chile, (EFE).- La Corte Suprema chilena retiró hoy nuevamente y por tercera vez la inmunidad al ex dictador Augusto Pinochet, esta vez por su responsabilidad en quince secuestros de la Operación Colombo, que encubrió la desaparición de 119 opositores en 1975.
La resolución fue aprobada con diez votos a favor y seis en contra de los 16 magistrados que integraron el pleno y que el pasado 7 de septiembre escucharon los alegatos de los abogados de las partes.
Con su decisión, el máximo tribunal ratificó un dictamen de la Corte de Apelaciones que por once votos contra diez había resuelto despojar a Pinochet del fuero que tiene como ex gobernante (1973-1990) y que a partir de hoy queda expuesto a un nuevo proceso.
El ex dictador quedó a disposición del juez Víctor Montiglio, que está a cargo de los juicios que involucran al militar, tras la jubilación del juez Juan Guzmán Tapia.
El magistrado, antes de cualquier diligencia relativa al inculpado, debe disponer la realización de exámenes psiquiátricos a Pinochet, para establecer si está o no en condiciones de afrontar un juicio, según el dictamen.
El juez Montiglio también deberá tomar una declaración indagatoria a Pinochet y ordenar la apertura de su ficha policial.
Este es el tercer desafuero aprobado por el máximo tribunal contra el militar de 89 años, que por razones de su supuesta "demencia" fue exonerado posteriormente en los dos juicios.
El primero se refiere al caso "caravana de la muerte", en el que se le imputó responsabilidad como autor intelectual en la ejecución y desaparición de 75 prisioneros políticos en 1973.
Pinochet también fue exonerado en el juicio por la Operación Cóndor, la coordinación de las dictaduras del Cono Sur para el exterminio de sus opositores en la década de los 70.
El desafuero del ex dictador fue recibido con satisfacción por los familiares de las víctimas y los abogados de derechos humanos.
"Creemos que la Corte Suprema ha dado una pequeña luz de esperanza en el marco de una vasta operación de impunidad que existe en este momento en el país respecto a los violadores de los derechos humanos", dijo el abogado querellante en la causa, Hernán Quezada.
El desafuero se da en momentos en que la oposición de derecha presentó al Parlamento un proyecto de ley para rebajar las penas a militares condenados por violaciones a los derechos humanos.
La iniciativa, presentada la semana pasada, fue precedida por el indulto otorgado por el presidente Ricardo Lagos a un militar condenado por el asesinato de un dirigente sindical en 1982.
"No esperaba otra resolución. Son tantos los antecedentes que existen contra Pinochet en su calidad de jefe de este aparato militar, criminal, llamado DINA (policía secreta de la dictadura), que no había otra posibilidad que despojarlo de su fuero", dijo el abogado Boris Paredes, otro de los querellantes.
En tanto, la defensa de Pinochet, encabezada por el abogado Pablo Rodríguez, prefirió no comentar el fallo de la Corte Suprema.
En el mismo momento en que el tribunal informaba del desafuero de Pinochet, un centenar de manifestantes participaba en una protesta contra los indultos y la impunidad frente al Ministerio de Justicia, a media cuadra del Palacio de La Moneda.
En la movilización fue detenida la presidente de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, Lorena Pizarro, abogados de derechos humanos y el candidato presidencial del izquierdista pacto "Juntos Podemos Más", Tomás Hirsch.
La Operación Colombo, ejecutada en 1975 por la DINA, incluyó la edición, por única vez, de las revistas "Lea", en Argentina y "O Novo Día", en Brasil, en las que se publicaron listas de las 119 víctimas, que en realidad habían sido detenidas meses antes en Chile por los servicios secretos.
En esas publicaciones apócrifas se afirmó que habían muerto en purgas internas del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), agrupación que combatió con armas a la dictadura.
La prensa nacional de la época acogió ampliamente las falsas versiones, bajo titulares como "Miristas se exterminan como ratas", en circunstancias de que las 119 víctimas habían sido detenidas semanas antes en Chile y sus familias habían presentado recursos de amparo que fueron rechazados por los tribunales.
Fuentes judiciales estiman que la decisión adoptada hoy puede ser un importante antecedente para lo que será la vista del desafuero en el marco del caso del Riggs Bank de EU, en el que se investigan las millonarias cuentas de Pinochet.