Londres, (EFE).- La próxima subasta de la copia del vestido de boda de la fallecida princesa Diana de Gales propiedad del museo de cera londinense Madame Tussauds, ha causado polémica en el Reino Unido al criticar su diseñadora, Elizabeth Emanuel, que se quiera sacar provecho de "un pequeño pedazo de historia".
En declaraciones al diario "Daily Mail", Elizabeth Emanuel arremete contra el museo por querer desprenderse del traje, que fue encargado expresamente por Diana para que se expusiera al público al día siguiente de su boda.
El vestido, una copia idéntica del que la princesa lució en su boda con Carlos de Inglaterra, en 1981, es de estilo romántico y confeccionado con seda y tafetán, con diez mil perlas cosidas a mano y un largo velo de tul.
"Cuando faltaban pocos días para la boda, la oficina de Diana nos encargó que hiciéramos una copia del vestido para Madame Tussauds y, aunque no nos hizo mucha gracia, porque teníamos mucho trabajo, accedimos porque era una petición personal", explica Emanuel al diario.
La artista, que sólo cobró al museo el coste de los materiales, se sintió traicionada al saber que el traje se subastará el próximo 7 de diciembre en la casa Cooper Owen, por un precio estimado de más de 50 mil libras.
"¿Por qué no lo donan a otro museo? Seguro que otras personas lo apreciarían", se pregunta Emanuel.
Un portavoz de Madame Tussauds dijo al "Daily Mail" que el vestido "se expuso durante un año tras la boda y fue una gran atracción, pero desde entonces sólo ha salido del almacén dos veces".
El traje original se expone en la mansión de Althorp, en el condado de Northamptonshire (norte de Inglaterra), donde la princesa se crió y actualmente vive su hermano, el conde Spencer.
