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LA PAZ, BOLIVIA.- El comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Bolivia, almirante Luis Aranda, negó ayer que “existan aprestos de golpe de Estado” debido a la ola de protestas sociales y brotes de pugnas regionales entre el occidente y oriente del país.
Aranda, acompañado del ministro de Defensa Nacional, Óscar Arredondo, calificó de “irresponsable e inoportuno” el pronunciamiento que hicieron dos militares de baja graduación para conformar un Gobierno cívico-militar para desplazar al actual presidente Carlos Mesa.
Los tenientes coroneles Julio Herrera y Julio César Galindo, a través de un canal de televisión y emisoras de La Paz, a nombre de un movimiento generacional de militares de las tres fuerzas, pidieron ayer la renuncia del presidente Carlos Mesa.
“El Gobierno que queremos constituir es con la participación de todos los sectores, y si se da el triunfo de esta revolución, sólo habrá dos militares en el futuro gabinete”, dijo Julio Herrera a la red Erbol.
Herrera agregó que “para salvar la democracia se debe convocar a una Asamblea Constituyente para que ella decida los pasos a dar”. También sostuvo que “se debe recuperar el control total de nuestros hidrocarburos”.
Pero el comandante militar, el almirante Luis Aranda, descalificó a Herrera y Galindo. “Ellos pretenden enlodar a la institución en afanes golpistas cuando las fuerzas armadas respetan el Estado de Derecho y la institucionalidad vigente”, expresó.
Aranda aseguró que existe “subordinación y respeto en las pequeñas y grandes unidades militares”. El ministro Arredondo dijo que Herrera y Galindo serán procesados por la justicia militar.
“No son personas creíbles dentro de las Fuerzas Armadas. Este un hecho aislado”, agregó. El ministro de Gobierno (Interior), Saúl Lara, también restó importancia al pronunciamiento de los dos militares. “Son personas descalificadas y el caso será resuelto en los tribunales militares”, dijo.
