Elimina el Banco
de México el
vínculo monetario
de México y
Estados Unidos
Agencias
MÉXICO, DF.- El Banco de México desligó ayer la marcha de las tasas de interés internas con las de Estados Unidos, en una decisión ampliamente esperada por un mercado que interpretó el anuncio como el término del ciclo de endurecimiento monetario iniciado en febrero de 2004.
El Banco de México eliminó una referencia al vínculo de las tasas en México con la ?astringencia? monetaria en Estados Unidos, aunque sostuvo que ?mientras así lo juzgue conveniente, las condiciones monetarias internas no deberán relajarse?.
Como se esperaba, el banco central mantuvo el corto, la herramienta clave con la que limita la liquidez del sistema monetario, sin cambios en 79 millones de pesos diarios (unos 7.3 millones de dólares).
Con su política monetaria restrictiva, el banco central busca que la inflación anual se ubique en un rango de entre dos y cuatro por ciento. Hasta mayo, la inflación a 12 meses se situó en 4.60 por ciento.
En un sondeo realizado el jueves, los 19 participantes consultados esperaban que el banco central eliminara en su anuncio el vínculo con las tasas de Estados Unidos y no esperaban cambios en el corto.
Desde mediados del año pasado, el banco central había incluido en sus comunicados su intención de que las condiciones en México reflejaran ?la mayor astringencia que se presente en Estados Unidos?.
Eliminada esa referencia, en el mercado se asume que el ciclo de incrementos en el corto ha llegado a su término.
?Esto significa que todo el proceso está concluido y en el mediano plazo vamos a comenzar a ver las tasas de referencia bajar a cerca del 7.5 por ciento nominal, lo que creo es un nivel neutral de intervención?, dijo Alberto Bernal, analista de la firma IDEAglobal en Nueva York.
Los 12 endurecimientos monetarios o aumentos del corto decretados por el banco central desde inicios del año pasado han llevado a las tasas de interés a subir en cerca de cinco por ciento a 9.74 por ciento.
Usualmente, un aumento del corto impulsa a las tasas de interés y reduce las presiones de los precios, además que tiende a apreciar a la moneda.
Tras la decisión del banco central, los mercados operaban con tranquilidad y el peso mexicano cotizaba firme en 10.7588 unidades por dólar, mientras que la bolsa bajaba un 0.47 por ciento en línea con un descenso en Wall Street.
Sin cambios
El Banco de México decidió mantener sin cambios el objetivo de saldos diarios corto en 79 millones de pesos ya que considera que las perspectivas para el resto del año siguen siendo relativamente favorables.
Asimismo, la Junta de Gobierno, desligó las tasas de fondeo con las Estados Unidos al estimar que las condiciones monetarias internas no deberán relajarse. Ello, con el fin de reforzar la tendencia de la inflación hacia la meta del tres por ciento.
De acuerdo con el boletín del banco central, la información más reciente apunta a una desaceleración de la economía mundial durante el segundo trimestre de 2005, afectada sobre todo por la permanencia de precios altos de los energéticos. Sin embargo, las perspectivas para el resto del año siguen siendo relativamente favorables.
Además, ha comenzado a disiparse la creciente aversión al riesgo que caracterizó hasta hace poco a los mercados financieros. Ello ha propiciado nuevamente un mejor entorno crediticio para emisores soberanos y privados en los mercados internacionales.
La economía mexicana disminuyó su ritmo de crecimiento a lo largo de los primeros meses de este año, principalmente a causa del ?efecto calendario? relacionado con la Semana Santa. No obstante lo anterior, se anticipa que tanto el consumo como la inversión privadas continuarán expandiéndose. En cambio, se prevé una disminución del dinamismo de las exportaciones manufactureras, de manera tal que el aumento estimado del PIB (entre 3.5 y cuatro por ciento) se sustentará en mayor medida sobre bases internas.
Focos amarillos
En lo que toca a la inflación, el balance de riesgos ha mejorado, aunque subsisten elementos preocupantes:
a) En el transcurso de 2005 la inflación general ha
disminuido significativamente respecto a la observada
a finales de 2004, aunque se encuentra todavía por
encima de la meta de inflación. Ello se ha derivado de la reversión de algunas de las perturbaciones de oferta que la afectaron temporalmente.
n En lo específico, se ha mitigado el alza de las
cotizaciones internacionales de diversas materias
primas, ascenso que impulsó la inflación durante
el año pasado.
b) La inflación subyacente también ha tenido un
descenso apreciable. Ello como consecuencia, sobre
todo, de que los choques de oferta que habían incidido negativamente en este renglón se han venido
desvaneciendo. Por una parte, han cedido las presiones sobre los subíndices de alimentos y de vivienda; pero, por la otra, los subíndices de otras mercancías y de
servicios distintos a la vivienda se han incrementado.
c) Aunque las expectativas de inflación para este año han descendido, las de mediano y largo plazo se mantienen por arriba de la meta de inflación.