Madrid, (EFE).- Santa Teresa de Jesús no sufría ataques de epilepsia ni padecía ataques de histeria, según un estudio del catedrático de Medicina español Avelino Senra difundido y que rebate las tesis de otros autores sobre los males de la religiosa.
Senra, especialista en la vida de esta santa española, sostiene, tras analizar clínicamente los escritos de la propia Teresa de Avila sobre su enfermedad, que el diagnóstico más probable es que padecía una meningoencefalitis brucelósica -la única curable sin tratamiento- que se acompaña de radiculitis y parkinson tardío.
El autor declaró a EFE que el libro es fruto de más de treinta años de investigación y estudio de los escritos de la Santa y de lo que se ha publicado sobre la vida y la obra de Teresa de Avila.
Explicó que comenzó a interesarse por esta investigación tras leer "El libro de la vida", autobiografía de Santa Teresa, que considera su obra "más madura", y que al leerlo se encontró "con un historial clínico apasionante que contrasta con todo lo que se ha publicado sobre su enfermedad".
El catedrático, que considera su obra como el resultado de "un gran hobby" que le ha impulsado "durante treinta años a investigar apasionadamente sobre la Santa", rechaza asimismo las teorías e interpretaciones que achacan los males de Teresa a un rechazo de la vida conventual, porque ella misma -afirma Senra- repite una y otra vez en sus escritos "que su contento era grande".
El autor afirma que "es evidente que nuestra Santa tenía una gran afición a los temas médicos y no es menos cierto que nos da una excelente lección a los médicos con el modo magistral con el que describe sus enfermedades y síntomas".
Y agrega que "esta descripción tan precisa es una de las razones por las que algunos colegas se han ocupado del caso clínico de Santa Teresa".
"Solamente -precisa el investigador- tuvo convulsiones en una ocasión en toda su vida; pero cada autor que se ocupó de su enfermedad le añadió, inventándolas, todas las que consideró oportunas".
La existencia de convulsiones sintomáticas ocasionales, una vez en la vida, argumenta Senra, "no tiene nada que ver con la epilepsia, que es una enfermedad crónica con ataques convulsivos permanentes a lo largo de la vida".
Asimismo, el autor considera que los problemas de esta Doctora de la Iglesia no tienen nada que ver con la psicología, sino que están causados por una enfermedad orgánica.
Sobre el "arrobamiento místico" de la santa, Senra considera que tiene que ver con la Religión y la Teología, cuestiones que no entra a estudiar en el libro "porque se tiene fe o no, y son temas que hay que dejarlos al estudio de la Teología".
