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Nueva York, EU.- Antes de lanzar al aire su propia versión televisiva de The Apprentice, Martha Stewart había pensado que desplazaría a Donald Trump. Aunque The Apprentice: Stewart no ha tenido muy buena acogida en los índices de teleaudiencia, Stewart tenía al principio esperanzas más ambiciosas, incluso que su programa en la cadena NBC eclipsara al Aprendiz original de Trump.
?Pensé que estaba reemplazando a Donald?, dice Stewart en la edición del 14 de noviembre de la revista Fortune, que saldrá a la calle el siete de noviembre. ?Incluso se discutió que yo iba a despedir a Donald en el primer programa?.
¿Acaso Trump se enteró de que ella intentaba desplazarlo de su propio programa? ?No creo que él lo supiera?, dice Stewart a la revista.
En cambio, Trump sigue con su programa en su cuarta temporada y recientemente comentó que éste se había visto disminuido por el de Stewart. El Apprentice de Trump ha tenido un promedio de unos diez millones de telespectadores por semana, unos cuatro millones menos que en la temporada anterior. El Apprentice de Stewart tiene cerca de siete millones de televidentes.
?Creo que hubo confusión entre el Apprentice de Martha y el mío, pero el mío sigue andando bien y... el otro ha tenido serias dificultades?, dijo Trump recientemente en un programa radial. ?Creo que probablemente perjudicó al mío y más o menos lo anticipé?. Stewart también revela en Fortune un plan que no pudo concretar: comprar Kmart. En 2002, cuando la gigantesca empresa minorista iba a la quiebra, Stewart sopesó la idea de adquirir la compañía, que vende su marca Martha Stewart Everyday.
Stewart, de 64 años, también dice que piensa vender su residencia Turkey Hill en Westport, Connecticut. ?Casi no voy más allí. No la extraño?, explicó. Después de pasar cinco meses en prisión por mentir sobre una venta de acciones en 2001, a lo que le sucedieron seis meses de arresto domiciliario, Stewart se jacta de haber aprendido ?de que realmente no me pueden destruir?.