Buenos Aires, (EFE).- Un juez argentino fue destituido por haber actuado con "ociosidad" y "pereza", después de que un jurado comprobara que estudiaba la carrera de Psicología cuando en su lugar debía de velar por los derechos de los detenidos.
El jurado de enjuiciamiento del Consejo de la Magistratura entendió que el juez de ejecución penal Néstor Narizano incurrió en "mal desempeño de sus funciones" y resolvió removerlo del cargo que ocupaba.
"Me destituyeron por leer dos horas de (Sigmund) Freud por día, pero yo lo hacía para poder comprender la forma de pensar de los delincuentes. Esto es una injusticia, una mancha más para la Justicia argentina", aseguró el juez a la prensa tras conocer el veredicto.
Narizano fue suspendido de sus funciones en diciembre último después de ser acusado de cursar la carrera de Psicología en una universidad privada en horarios que se superponían con los de su trabajo.
Como juez de ejecución penal, Narizano tenía que visitar penitenciarías, resolver peticiones de salidas transitorias y laborales y conceder excarcelaciones, entre otras tareas.
La denuncia fue realizada por su ex secretario Javier De la Fuente, quien cuando declaró en el juicio afirmó que el magistrado "no quería firmar resoluciones y se enojaba cuando le llevaban muchos expedientes".
Los miembros del jurado aprobaron dos de los cuatro cargos por los que Narizano llegó a juicio.
El más grave fue "haber obstruido en su ociosidad el desempeño del tribunal a su cargo por la pereza con que se condujera", conducta muy lejana de la "laboriosidad" que debe caracterizar a los jueces, indicó el tribunal.
La otra imputación que fue aprobada fue la "desidia" con que el juez trabajaba en el tribunal, al "no haber velado por las garantías y derechos" de los detenidos que estaban a su disposición.
El jurado remarcó que Narizano "excluía de sus visitas los penales más conflictivos" y rehusaba a otorgarles audiencias a los presos, que a veces requerían hablar con él por problemas de salud, entre otros asuntos.
El 17 de diciembre pasado, semanas después de haber sido suspendido por el Consejo de la Magistratura, Narizano presentó su renuncia al cargo, pero la dimisión no fue aceptada por el Gobierno.
