San Antonio, Texas.- El entrenador de los Pistones de Detroit, Larry Brown, fue categórico cuando dijo que su equipo no estaba obsesionado con la figura del escolta argentino Emanuel Ginóbili, sino con hacer su mejor baloncesto de equipo y las cosas bien para superar a Spurs de San Antonio.
Brown fue categórico cuando dijo que su equipo respetaba a todos y cada uno de los jugadores de los Spurs y buscarán conseguir la victoria en el segundo partido de las finales de la NBA que se disputará hoy domingo en el SBC Center de San Antonio.
Nadie cuestiona dentro de los Pistones que Ginóbili hizo un gran partido en el inaugural de las finales, pero sin la aportación del alero Tim Duncan, el base Tony Parker y la gran defensa del alero Bruce Bowen.
?No vamos a ser tan ingenuos como para marcar sólo a un jugador y dejar que otros nos hagan más daño?, comentó Brown. ?Creo que se han sacado un poco las cosas fuera de perspectiva, simplemente los Spurs ganaron el primer partido y nosotros tendremos que demostrar que podemos ganar en San Antonio?.
Para Brown si hay un gran peligro individual siempre dentro de los Spurs no es otro que Tim Duncan, al que consideró mucho más clave que Ginóbili después que consiguió 24 puntos y 17 rebotes y los mantuvo en el partido en la primera parte.
?Tim es un jugador excepcional y aunque ?Manu? Ginóbili y Parker hicieron su aportación, su liderazgo fue siempre decisivo?, destacó Brown. ?Nuestros hombres altos no pudieron con Tim y eso es lo que tiene que cambiar en el segundo partido?.
Menos considerados con el trabajo de Ginóbili fueron algunos de los jugadores de los Pistones, que admitieron la aportación que hizo, pero tampoco la vieron como espectacular. Los aleros Rasheed Wallace y Tayshaun Prince, el que tuvo la mayor responsabilidad de marcar a Ginóbili, no quisieron darle demasiado crédito a la labor del jugador internacional argentino.
?Estuvo bien, pero no le veo nada de especial?, expresó Wallace, mientras que Prince alegó que ?me metí en faltas desde un principio y eso me limitó en cómo lo defendía?.
Por su parte, el base Chauncey Billups, el mejor jugador de los Pistones en el primer partido, y el escolta Richard Hamilton, que no respondió a su condición de líder encestador del equipo, admitieron que el segundo partido iba a ser muy diferente.
?Creo que vamos a hacer los ajustes correspondientes y podemos jugar todo el tiempo como en el primer cuarto del partido inaugural?, comentó Billups. ?Sabemos cómo corregir errores y vamos a intentar conseguir la victoria?.
Mientras, dentro de los Spurs reina la tranquilidad y la confianza de que pueden de nuevo ganar a los Pistones en el segundo partido y ponerse con la ventaja de 2-0.
A pesar de lo dicho por Brown y algunos jugadores de los Pistones, Ginóbili reconoció que iba a estar mucho más vigilado que en el primer partido, pero aceptaba el reto.
?Sé que estaré más vigilado, pero eso igualmente le dará más posibilidades de anotación a Tim, Tony y el resto de los compañeros que estén en el campo?, valoró Ginóbili.
El escolta argentino, que anotó 26 puntos en el primer partido, estuvo de acuerdo tanto con Brown como con el entrenador de los Spurs, Gregg Popovich, que el deporte del baloncesto es un juego de conjunto.
?Nuestros triunfos han sido precisamente porque hasta la gran estrella como es Tim Duncan tiene más presente que nadie la filosofía de equipo?, destacó Popovich. ?Un solo hombre no puede ganar un partido?.
Popovich reiteró que lo más importante era la defensa, y aprovechar las debilidades que pueda presentar el rival.
?Eso fue lo que hicimos en el primer partido y lo que debemos conseguir en el segundo para seguir en la lucha por el título de campeones?, subrayó Popovich, que ya ganó con los Spurs los títulos de la NBA en 1999 y en 2003.