El director del Comité del Ayuntamiento de Patan, Mohamed Ramzan Mian, y tres policías que le acompañaban fueron asesinados por supuestos terroristas.
Nueva Delhi, (EFE).- Al menos diez personas murieron en las últimas horas en dos enfrentamientos distintos en la región himaláyica de Cachemira, informaron hoy fuentes oficiales.
El director del Comité del Ayuntamiento de Patan (en el distrito de Baramulla, en el norte de Cachemira), Mohamed Ramzan Mian, y tres policías que le acompañaban fueron asesinados por supuestos terroristas.
Ramzan Mian y dos de los agentes murieron cuando eran trasladados al hospital, mientras que otro policía falleció posteriormente.
Por otro lado, seis supuestos miembros del grupo terrorista separatista islámico "Lashkar e Toiba" fueron abatidos por las autoridades indias tras un enfrentamiento que duró más de cinco horas.
El incidente tuvo lugar sobre las 23.50 horas de ayer (18.20 GMT) cuando un grupo de supuestos terroristas separatistas intentaron cruzar la línea divisoria provisional entre las partes paquistaní e india de la región de Cachemira.
Los soldados indios destacados en la Línea de Control (LOC) mantuvieron un tiroteo con los terroristas durante más de cinco horas, al acabo del cual, recuperaron los cadáveres de seis de los insurgentes.
Según las fuentes, los otros presuntos guerrilleros consiguieron escapar al territorio paquistaní.
Las autoridades se incautaron de seis rifles AK-47, un lanzagranadas y distintos tipos de granadas de fabricación paquistaní y china, que transportaban los rebeldes.
Este incidente es el cuarto de este tipo ocurrido en la línea divisoria entre la India y Pakistán en la última semana, en los que 22 guerrilleros separatistas cachemires han resultado muertos.
Cachemira es una región de mayoría de población musulmana, que ha sido disputada por Nueva Delhi e Islamabad desde la partición de la India y Pakistán en 1947.
Desde 1989, una docena de grupos guerrilleros separatistas islámicos, como el "Lashkar e Toiba", luchan contra las autoridades indias para exigir la independencia del territorio o su anexión a Pakistán.
Según cifras del Gobierno de Nueva Delhi, más de 45 mil personas han muerto por la violencia en la zona de Cachemira bajo administración de la India, mientras los rebeldes elevan la cifra de fallecidos a unos cien mil.
