Reconoce Herrera Delgado la existencia de “lagunas” en la normatividad.
Las autoridades municipales no se ponen de acuerdo y mientras los “table dance” siguen operando impunemente. El alcalde Jorge Herrera Delgado dice que hay “lagunas” en la normatividad; el juez administrativo Sergio Sánchez indica que el “exhibicionismo pagado” está permitido y el titular de la Coordinación de Inspección Municipal, Rubén Cárdenas, sólo levanta actas administrativas en estos establecimientos porque están operando fuera del giro permitido, pero no ve otras anomalías.
Sergio Sánchez, encargado del Juzgado Municipal en forma sistemática se ha negado a dar información; aduce que “nunca tiene tiempo de atender a la prensa si no es en su oficina porque prefiere grabar las conversaciones”. Este funcionario explicó en un medio de comunicación que los actos de “exhibicionismo pagado” están permitidos, basándose en el Reglamento de Actividades Económicas, en su artículo 52, en el que se especifica que para realizar un espectáculo público (que no especifica si es de tipo sexual) se debe pagar un permiso en Ventanilla Única.
Por su parte, el Bando de Policía y Gobierno Municipal explica claramente en su artículo 106, fracción IV, que “son faltas administrativas o infracciones que atentan contra la moral pública y el respeto a los habitantes del municipio”.
Y sigue en su fracción IV: “sostener relaciones sexuales o realizar actos de exhibicionismo sexual en la vía pública, lugares de uso común o en sitios de propiedad privada con vista al público”; sin embargo, por la realización de esos actos en los “table dance”, las actas administrativas no se levantan en ningún momento por parte de la Coordinación de Inspección Municipal en relación con la violación al articulo antes mencionado.
Incluso El Siglo de Durango fue testigo cuando en un operativo que realizó Inspección Municipal en varios antros se visitó el “table dance” “La Pachanga”, en donde los inspectores sólo realizaron verificación de las tarjetas sanitarias de las bailarinas y nada más.
Por su parte, Jorge Herrera Delgado indicó que hay “lagunas” en la normatividad y que en donde se puede palpar es precisamente en los antros, pero reiteró que se tiene que cubrir la parte legal o jurídica.
Sin embargo, en las actas administrativas que se levantaron, por ejemplo, recientemente a los “table” “Ireo” y “Greco”, sólo fueron por operar fuera del giro permitido, pues no han obtenido ni siquiera el permiso de centro nocturno, sólo el de restaurante-bar.
El Alcalde opinó que a veces se puede ingresar por una “puertecita”, pero ya después las autoridades no saben ni qué sanción aplicarles, porque no la hay, así que manifestó que habrá que trabajar en la conformación de la reglamentación en estos rubros.
Malinterpretación
A unos sí y a otros no
El artículo 52 del bando de Policía y Gobierno Municipal se refiere al apartado de centros nocturnos, discotecas y salones de eventos sociales, pero cabe destacar que el “Ireo” y el “Greco” operan como restaurante-bar. Hay que recordar que una de las actas administrativas que se levantaron a Zona Cero (que después se clausuró y que sí es centro nocturno), fue por presentar un espectáculo denominado “Sólo para Mujeres”.
En este sentido, se reproduce a continuación textualmente, el contenido del “ARTÍCULO 52.- Para llevar a cabo bailes, celebraciones, cualquier evento social o espectáculo público en los que la entrada se condicione a cualquier tipo de pago, en restaurantes, bares, clubes, asociaciones, centros de recreo o casas particulares que no tengan licencia como salones de eventos sociales o para la presentación de espectáculos públicos, se requiere permiso expedido por la Ventanilla Única, que lo extenderá al cubrirse el pago correspondiente, el cual, en su caso, no rebasará el horario que tiene autorizado su giro, apercibiendo al organizador que es su responsabilidad guardar la seguridad y el orden público. En el caso del presente artículo el permiso sólo podrá concederse una sola vez por mes en el mismo lugar”.
Ni el “Ireo”, ni el “Greco” tienen permiso de la Ventanilla Única.
