Dinero que no es tuyo gástalo. El dinero mal habido se vuelve desecho... y siguen los dichos con el dinero que se gana o adquiere fácil; y más cuando se sabe que no hay peligro alguno o siquiera una somera revisión del destino que tomará o haya tomado esa “lana”, inclusive ni cárcel para quien se lo robe porque el peculado no es delito (es deleite para los políticos).
En México la poca credibilidad que algunos ciudadanos podían tener por la clase política con estas miasmas (peor que una vomitada de borracho), se ha perdido.
Nuestros zaragates además de perder compostura en la función pública han perdido la vergüenza, con la moral y ética extraviada se hacen los occisos para llevarse, cada vez que se les presenta la oportunidad, una buena tajada de “lana” del pueblo, el caso de nuestros diputados y senadores que hacen con el dinero ajeno lo que les viene en gana.
Cada año es lo mismo, sobre todo en fechas de fin de año o de fin de sexenio, la gente protesta, los ciudadanos honrados maldicen y hasta se pretende hacer un plebiscito como resultado de la Ley obsoleta para castigar a estas “ratas” y para regular este despilfarro por parte de los políticos, los medios de información incomodan un poco a estos legisladores, a los dueños de los partidos y a cientos de funcionarios públicos que en su despedida se regalan y llevan hasta los hoyitos de la pared donde estaba el clavo que detenía el cuadro con el retrato del jefe en turno, vulgo tótem político o padrino.
Aquí sí que queda la canción del boricua Rafael Hernández, por aquello de que salen “locos de contento” cuando se autoaprueban los diputados su bono de marcha, su aguinaldo, su sueldo, su dieta etcétera, que suman más de $450 mil pesillos, casi medio millón de pesos se llevará cada diputado del Congreso Local de Coahuila esta Navidad.
Ahora, por el otro lado, eso y más merecerían si su trabajo redundara en hechos y propuestas que elevaran la calidad de servicios hacia los habitantes de este amolado estado, donde sólo la propaganda de las obras es hasta ahora lo más digno de esta multicitada función.
¿Cuáles fueron las iniciativas que en lo particular y en lo general se aprobaron estos legisladores en este periodo? Nadie las conoce, ni ellos mismos, lo mismo podemos decir de los de arriba, el caso de nuestra más alta tribuna el Congreso de la Unión donde los legisladores siguen soslayando las grandes reformas como son la energética y la fiscal, sólo por citar algunas.
Reformas que en otros países ya fueron aprobadas y en cualquier momento nos rebasarán, sólo que aquí siempre nuestros ilusos legisladores andan en campaña o metidos en pleitos estériles por su lealtad constitucional, que como consecuencia trae parálisis a todos los sectores. Y seguimos sumidos en esta economía mediocre, con una cultura política mediocre, con reformas mediocres, curados en salud con políticos que son casi mediocres, pero eso sí, con un sueldo de primer mundo en un país tercermundista y bananero como el nuestro.
Los partidos de Oposición ¿...? los que se oponen a todo sólo por el hecho de pensar que son de izquierda, los que se quedaron atrapados en el túnel del tiempo y que se oponen, pero que no proponen nada, ahora resulta que sí estuvieron de acuerdo en recibir el bono, tal vez lo reciban “bajo protesta”, esto sólo para que después no digan que dejaron de ser de izquierda.
Los que sí nos quieren ver la cara o ya de plano nos la vieron, son los partidos políticos apoyados por el IFE con la carretada o cascada de “lana” aprobada (mil quinientos millones de pesos) y que sin contemplación y remordimiento se gastarán en campaña sus candidatos a la Presidencia de la República, candidatos de baja estatura para un país como el nuestro y que la verdad este pueblo noble no merece.
Pero eso sí, los candidatos (Madrazo, Calderón y López Obrador) con una categoría bofa que la mercadotecnia con dinero de los mexicanos se encargará de elevarla. Sin duda es una imagen triunfalista la que se nos diseña por parte del Gobierno para que quede sólo en enojo por parte de los ciudadanos, por el abuso en el uso y costumbre de que a los funcionarios públicos se les otorgue un despido como reyes en las primicias de la transición semidemocrática, donde para colmo algunos diputados, senadores, ex gobernadores, ex secretarios y ex presidentes municipales no contentos con ese botín, como los canguros van a saltar con todo y su bolsa marsupial llena de billetes a otro puesto.
¿Qué lectura nos puede dar este destino manifiesto por parte de estos mequetrefes? Que en este país de ciegos cualquier tuerto es rey y que la sentencia sigue en pie. México es un país que se gobierna con la Ley del menor esfuerzo, ¿será?
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