FRANCISCO I. MADERO, COAH.- Cerca de las vías, cimentado en lo que ahora es la colonia Fresno del Norte, se encuentra el edificio que mejor refleja la decadencia del campo. El verlo, es echar un vistazo a épocas pasadas donde los campesinos cuidaban de la tierra para que ésta pudiera brindar sus frutos.
Ubicado en la avenida Bohemia y calle Emilio Carranza de la mencionada colonia, primeramente fue el Banco Ejidal, más tarde el Banco Agrario y por último el Banrural. Las instalaciones del enorme edificio servían de almacén de granos, en cada uno de los tubos de su estructura caben 350 toneladas siendo diez mil en total.
?En los 40?s se hicieron los cimientos, después, cuando ya estaba el edificio, trajeron la maquinaria, toda era alemana, las letras que decían Banco Ejidal se iluminaban?, cuenta el señor Esteban Caudillo Gasca, quien trabajó en el lugar desde sus inicios, ahora atiende una miscelánea que se ubica frente al edificio abandonado donde ni las letras quedaron de su gran apogeo.
Poco a poco el lugar se fue quedando vacío, ya no había qué almacenar, más tarde una empresa extranjera lo utilizó como almacén hasta que lo consideraron incosteable. A partir de 1997 el edificio se quedó en completo abandono y los malvivientes hicieron de él su guarida.
Hoy se puede ver el deterioro de sus instalaciones, luce abandonado y no es raro ver hombres que entren de manera imprevista por uno de los tantos agujeros de las paredes a orinar o a echar basura.
?Hace años los muchachos se drogaban, metían señoritas, les decían ?Los Locos? y la gente ya ni quería pasar por ahí?, señala el señor Caudillo. Ante las quejas de los ciudadanos las patrullas de la Dirección de Seguridad Pública Municipal comenzaron a realizar rondines constantemente por esa área para evitar que los ?cholos? siguieran aterrorizando a la comunidad.
Sin embargo, todavía se escuchan los chiflidos de algunos vagos que viven en dichas instalaciones y que se les puede ver por los recovecos de lo que fue el Banco Ejidal, las paredes rayoneadas al estilo ?graffiti? y los botes con pegamento amarillo, que usan para drogarse los delatan.
?Yo conozco bien ese lugar porque yo empecé limpiando, ahora me da tristeza verlo así, deteriorado, se me figura que así se va acabando uno también?, dice don Esteban.