El texto asegura que la ley debe proteger a los embriones, debido al derecho inalienable de todos los seres humanos desde su concepción.
Ciudad del Vaticano, (EFE) - El Compendio del Catecismo de la Iglesia Católica, que se presentará el próximo día 28 en el Vaticano, reitera la protección del embrión, considera inmoral la fecundación artificial y contempla la desobediencia civil cuando las leyes se oponen a las exigencias de orden moral.
Así lo aseguran hoy algunos diarios italianos, que han anticipado algunos puntos del Compendio, que contiene de manera concisa los contenidos fundamentales de la fe y la moral católica.
El Compendio, destinado a los católicos, no recoge grandes novedades respecto al Catecismo, sino que lo que hace es presentar los contenidos de la fe católica bajo el estilo pregunta-respuesta.
El texto asegura que la ley debe proteger a los embriones, debido al derecho inalienable de todos los seres humanos desde su concepción. "Si no es así -se asegura que dice el documento-, se minan las bases del estado de derecho".
Sobre la inseminación y la fecundación asistida, el documento vaticano las califica de inmorales y lo justifica afirmando que separan la procreación del acto en el que el matrimonio se entrega mutuamente.
Para la Iglesia se trata, según los datos adelantados por la prensa italiana, del dominio de la técnica sobre el origen y el destino de la persona.
Otro punto destacado es la objeción de conciencia y el texto señala, según lo filtrado, que el ciudadano no debe obedecer cuando las leyes de las autoridades civiles se oponen a las exigencias del ordenamiento moral.
La elaboración de este Compendio la pidió el papa Juan Pablo II (1978-2005) al entonces prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe (ex Santo Oficio), el cardenal Joseph Ratzinger - actual Papa Benedicto XVI-, en marzo de 2003, cuando se cumplieron diez años de la promulgación del Catecismo.
Juan Pablo II tomó esa medida tras constatar, según precisó en una carta que envió a Ratzinger, que después de esos años era conveniente un breve texto que contuviera "todos los elementos fundamentales de la fe y de la moral católica formulados de manera simple y clara".
"El Compendio del Catecismo de la Iglesia católica deberá contener de manera concisa los contenidos esenciales y fundamentales de la fe de la Iglesia. Respetando la integridad doctrinal, será una especie de vademécum que permita a las personas, creyentes y no creyentes abarcar todo el panorama de la fe católica", decía el entonces Pontífice en su carta a Ratzinger.
El cardenal Ratzinger, encargado en aquellos años de velar por la ortodoxia católica, presidió una comisión especial.
El Compendio, que consta de 150 páginas y está divido en cuatro partes, ha sido redactado en forma de diálogo, es decir, con preguntas seguidas de respuestas sintéticas, al considerar el Vaticano que de esta manera su lectura es más fácil y atractiva para el lector, según fuentes vaticanas.
El Catecismo de la Iglesia Católica, de 450 páginas, fue firmado por Juan Pablo II en junio de 1992. En los primeros diez años se vendieron ocho millones de copias en todo el mundo y ha sido traducido a sesenta idiomas.