AP
Dos nuevas vacunas contra la tosferina podrían prevenir hasta un millón de casos entre adolescentes y adultos cada año, e impedir que estos casos, por su parte, infecten a niños que pueden morir de esa enfermedad, dijo un estudio del gobierno.
La vacuna, ensayada en casi 2 mil 800 personas de 15 a 65 años de edad, demostró una efectividad del 92% en la tarea de impedir la infección con la bacteria de esa enfermedad, que es altamente contagiosa.
La tosferina afecta al organismo durante semanas y provoca una tos tan severa que hasta ocasiona fracturas en las costillas. La enfermedad bacterial puede ocasionar la muerte en los pacientes infantiles, en particular entre los bebés no vacunados.
Disminuyen casos
Los casos tosferina declinaron drásticamente durante los últimos 50 años porque la mayor parte de los niños recibieron varias inoculaciones antes de cumplir los 6 años. No obstante, la inmunidad se deteriora con el paso del tiempo, y los brotes entre los adultos y los adolescentes comenzaron a aumentar rápidamente durante la década pasada. Según la Asociación Nacional de Inmunización, los brotes entre adultos y adolescentes abarcan alrededor de un 60% de todos los casos de tosferina.
Prueban nuevas vacunas
A principios de este año, la Dirección de Comestibles y Medicinas aprobó dos nuevas vacunas de refuerzo para mejorar la inmunidad, Boostrix, de los laboratorios GlaxoSmithKline PLC, para individuos de 10 a 18 años, y Adacel, de Sanofi-Aventis SA, para personas de 11 a 64 años, que incluye inoculación contra la difteria y el tétano.
La parte correspondiente a la tosferina de esas vacunas es similar a la vacuna utilizada en el estudio.
Las nuevas vacunas utilizan partes purificadas de la bacteria para mejorar la inmunidad del paciente. Las vacunas anteriores contenían el germen completo y tenían más posibilidades de ocasionar efectos secundarios, incluyendo fiebre, temblores, somnolencia y falta de apetito.