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MANILA, FILIPINAS.- Las fuerzas de seguridad fueron puestas en alerta ayer en la capital de Filipinas, horas antes de que la presidenta Gloria Macapagal Arroyo viajara a Nueva York para asistir a una cumbre mundial en las Naciones Unidas.
El Ejército dijo que el alerta no tenía relación con insistentes versiones de que algunos oficiales de bajo rango, descontentos con el rechazo del Congreso a iniciar un juicio político a Arroyo, podrían intervenir en la crisis política.
La Policía elevó el alerta en la noche del domingo cuando grupos de transporte izquierdistas iniciaron una huelga contra los altos costos de los combustibles.
?Esto (el alerta) es en relación con la partida hoy (ayer) de nuestra presidenta a las Naciones Unidas. Estará en vigencia hasta su retorno el 17?, dijo el portavoz del Ejército, teniente coronel Buenaventura Pascual.
?Nuestros oficiales y hombres están siguiendo la cadena de comando. Ellos cumplen las tareas que les han sido ordenadas. No vemos ahora ningún problema en las fuerzas armadas?, agregó.
Arroyo puso fin pacíficamente a un motín de un día de unos 300 soldados en julio del año 2003.