El Siglo de Torreón
GÓMEZ PALACIO, DGO.- Aparecer en televisión y presentar su show en diferentes ciudades del país no exime a Javier Carranza, mejor conocido como ?El Costeño?, a tener problemas de dinero.
La apatía de la gente por salir a divertirse ya sea por la inseguridad o por la crisis económica, le está pegando fuerte lo mismo que a sus otros compañeros comediantes, por lo que en ocasiones se ven tentados a dedicarse a otra cosa.
Él por su parte tiene negocios en Acapulco; a veces quisiera dedicarse a ellos por completo pero cuando es tanto el gusto que siente de estar en los foros, que ?digo vamos a seguirle un rato más?.
Dentro del pequeño espacio que le asignaron como camerino, ?El Costeño? recibió a El Siglo de Torreón el sábado por la noche luego de la presentación que tuvo en el Teatro del Pueblo de la Expo Gómez.
Estaba tranquilo, contento, la gente se le había entregado. ?Hay plazas en las que a veces no se tiene el resultado que querido, pero a veces no depende de nosotros (los humoristas) sino del público. Yo salgo a divertirme (al escenario) pero si la gente no da... a mí me ha pasado?, dice.
Afortunadamente le ha sucedido muy pocas veces en los 18 años que lleva de carrera; por el contrario la mayor parte del tiempo se la pasa chévere pues viaja mucho, sale de la monotonía, conoce gente, ?pero si llega a cansar a veces?.
-¿En la vida real eres tan divertido como en el escenario?
-Soy muy serio, de hecho soy medio cohibidón, la mayoría de los comediantes somos así. Hay quienes fingen no serlo, hay compañeros que quieren hacerle creer a la gente que siempre estamos así (felices), hay unos que son hipócritas, pero el comediante tiene una vida normal, de hecho hay un contraste: la inmensa mayoría de los comediantes somos neuróticos... yo soy más neurótico que mala gente -, hace una pausa -. Soy enojón pero no soy mala gente.
De muy buen humor, Javier Carranza dijo que los chistes nunca se acaban pues siempre hay tela de dónde cortar, además el humorista no puede limitarse.
Sabe que en estos tiempos hay mucha competencia, pero también está consciente que no todos los comediantes son buenos, ?hay para rescatar, no lo digo por mí, lo digo por otros; para dedicarse a esto hay que tener inteligencia, pero para destacar hay que tener genialidad?.
Además de presentarse en el programa Hoy y en otras emisiones de Televisa, ?El Costeño? iniciará mañana por la noche una temporada de presentaciones junto con Roxanna Castellanos. El arranque es en Acapulco, luego realizarán una gira por todo el país.
Hace de las suyas.
Sus ?costeño-aventuras? causaron carcajadas de principio a fin; y no solamente porque platicó de sus buenos amigos Casiano y Enedina, sino también porque defendió a las ?gorditas?, porque habló de las suegras y porque le puso un hasta aquí a Paquita la del Barrio.
?Las gordas están escasas en estos tiempos de bulímicas y anoréxicas... si tiene una gorda amachínesela. Yo por ejemplo, a mi esposa le digo la Fat Away porque la que se encapsula la grasa es ella?.
El sábado por la noche las familias laguneras disfrutaron de la comicidad de ?el costeño? en el Teatro del Pueblo de la Expo Gómez. Durante una hora causó carcajadas al tocar temas de la vida diaria, en especial cuando le reclamó a los hombres que van a ver a Paquita la del Barrio pese a la ola de insultos que lanza contra ellos. ?Defiéndanse bue...s¡ ¿dices que soy rata de dos patas? A lo mejor sí soy rata, pero no de tu agujero?, dijo para luego agregar, ?mi esposa se cree muy salsa porque es la costeña?, provocando la risa de la concurrencia.
Aunque su show sí tuvo algo de picardía y doble sentido, también se distinguió por manejar chistes blancos. ?Mi esposa me preguntó ?¿qué me vas a regalar por nuestros cinco años de casados??, yo le dije cierra los ojos, ¿qué ves? ?nada?, pues eso te voy a regalar?.
Con su cangrejo y iguana sobre el hombro, ?El Costeño? se despidió entre una gran ovación en punto de las 11:35 de la noche, misma que dijo, recordará siempre.
