“Que el EZLN deslinda a todas las personas y las organizaciones civiles... de cualquiera de nuestras acciones futuras”.
Sub comandante Marcos
Después de un largo periodo de silencio, el sub comandante Marcos ha salido nuevamente a los escenarios. Y lo ha hecho con un fervor sorprendente.
La invitación al Inter de Milán para jugar un partido de futbol contra una selección del Ejército Zapatista de Liberación Nacional no era, por supuesto, más que un juego inocente, que en todo caso subrayaba que los zapatistas no son perseguidos en territorio nacional: de otra manera, la realización de un encuentro deportivo público sería imposible.
El comunicado del sub comandante de este pasado fin de semana fue más inquietante pero -conociéndolo- se encontraba todavía dentro de lo previsible. Sus histéricas acusaciones en contra de todos los políticos pueden esperarse de un dirigente que siempre ha mantenido que él -y sólo él- representa la ética política en el país. No debe sorprender siquiera que Cuauhtémoc Cárdenas haya sido víctima de su virulencia política. Ya en 1994, cuando el EZLN hizo su irrupción en el panorama nacional, el dirigente zapatista cuestionó al entonces candidato de la izquierda a la Presidencia de la República.
Lo sorprendente es que ahora la crítica se haya dirigido también en contra de Andrés Manuel López Obrador, el más probable candidato presidencial del PRD. El sub lo llamó “salinista”, lo cual en los círculos de izquierda en los que ambos se mueven es un abierto insulto. Tan grande es la identificación que López Obrador ha tenido tradicionalmente con Marcos que Federico Arreola, quien está organizando la recolección de fondos para la campaña del tabasqueño, decidió ayer en su columna periodística que el sub comandante debía estar bromeando.
No todo el mundo ve las cosas así. Un importante ex funcionario de la Secretaría de Gobernación señala que la crítica del sub comandante Marcos a López Obrador no se puede entender a menos que haya un acuerdo previo entre ambos. “Son uña y carne”, me dice: seguramente “la idea es mandarle una señal a los inversionistas internacionales de que López Obrador no es tan radical como pensaban”.
¿Será? No lo sé. Lo que me queda claro es que el comunicado del sub comandante de este 20 de junio es ominoso. Sin dar razones, Marcos emite una alerta roja para las áreas de control de su grupo armado. Y el lenguaje que usa parece prefigurar acciones violentas.
¿Qué motivó al sub comandante Marcos a pasar en unas semanas de la propuesta de un juego de futbol a una amenaza de nuevas acciones armadas? Una posibilidad es el hecho de que el mismo día de la alerta la Secretaría de la Defensa anunció el descubrimiento y destrucción de 44 plantíos de marihuana en zonas zapatistas. ¿Sintió el sub comandante que el Ejército estaba empleando la excusa del combate al narco para establecer un cerco? ¿Había interés de una organización que ha prohibido la venta y el consumo de bebidas alcohólicas en su territorio de defender el cultivo de drogas? La verdad es que no sabemos realmente lo ocurrido porque el sub comandante no ha ofrecido explicación alguna.
En la turbulencia política actual, sin embargo, no podemos sorprendernos de la necesidad del sub comandante de ocupar nuevamente un lugar protagónico. Los simpatizantes del zapatismo no pueden argumentar que Marcos no tiene intención de meterse en la política electoral. Su primera irrupción en el panorama político nacional se dio, precisamente, en 1994 al inicio de una campaña presidencial.
El EZLN y el sub necesitan recuperar su protagonismo. La vida fácil, sostenida por aportaciones de simpatizantes europeos que aprovechan los beneficios fiscales de sus países, se ha vuelto complicada. El Inter se sigue prestando al juego, pero muchos donantes se cuestionan si tiene sentido financiar a una organización revolucionaria cuyo propósito es derrocar a un Gobierno electo democráticamente. Por otra parte, el BBVA Bancomer anunció hace poco la cancelación de las cuentas que se usaban para canalizar fondos al EZLN para evitar posibles responsabilidades por lavado de dinero. Y quizá no sea fácil encontrar bancos que quieran abrir esas cuentas que le entregan dinero a un enmascarado.
Algo está planeando el sub comandante, que es un hombre a quien se le puede cuestionar por todo menos falta de inteligencia. Y lo más probable es que esté dos pasos delante de las especulaciones de cualquiera de nosotros. Tendremos que esperar, pues, para conocer su verdadero plan.
PRIVATIZACIÓN CHINA
El Gobierno de China ha anunciado planes para privatizar 42 de sus principales paraestatales -incluyendo firmas de electricidad y de petróleo- a través de colocaciones en bolsa. Los dirigentes chinos podrán ser comunistas, pero al contrario de los políticos mexicanos se dan cuenta de la necesidad de modernizar su obsoleto aparato paraestatal.