Agencias
MÉXICO, DF.- Standard & Poor’s subió ayer la calificación soberana en moneda extranjera de largo plazo de México a “BBB” de “BBB-”, así como en moneda local de largo plazo y corto plazo a “A” y “A-1” de “A-” y “A-2”, respectivamente.
Joydeep Mukherji, analista de Standard & Poor’s, comentó que el alza refleja el incremento gradual de la estabilidad macroeconómica atribuible a una mejora constante de la liquidez externa y a la profundidad que se ha logrado en los mercados financieros locales. Lo anterior, ha dado como resultado una mayor resistencia a los potenciales impactos negativos, añadió en un comunicado.
Explicó que la mejora del perfil de deuda ha reducido el riesgo de volatilidad en el desempeño fiscal, con pagos de intereses que se han reducido gradualmente a menos de 12 por ciento de los ingresos gubernamentales para 2005.
Asimismo, Standard & Poor’s dijo que el crecimiento de los mercados domésticos de deuda permite a México alejarse de una de las debilidades históricas de la mayoría de los países de América Latina: la incapacidad de aumentar la deuda de largo plazo en moneda local a tasa fija. Alrededor de dos tercios de la deuda del Gobierno central (sin incluir la deuda del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario -IPAB- y del programa Pidiregas) está denominada actualmente en moneda local, lo que reduce el riesgo de refinanciamiento y el impacto de acontecimientos externos adversos en los mercados financieros. Además, la mitad de esta deuda posee tasas de interés nominales fijas de un año o más, en comparación con un 14 por ciento en el año 2000.
La baja inflación, un banco central independiente y un eficiente manejo de la deuda, incluyendo un adelantado programa de refinanciamiento, deberán proteger la liquidez del Gobierno durante la campaña electoral de 2006 de posibles impactos negativos.
Mukherji destacó que la posición externa de México también se está fortaleciendo, gracias a una mayor sincronización entre los ciclos de negocios de Estados Unidos y el país y una correlación más estrecha entre las importaciones y exportaciones mexicanas.
Las remesas enviadas por mexicanos en el extranjero probablemente superarán los 14 mil millones de dólares (más de dos por ciento del PIB) en 2005, proveyendo al país de una importante protección frente a una potencial baja de las exportaciones petroleras, agregó.
El analista mencionó que la perspectiva de todas las calificaciones de largo plazo es estable y se basa en la “expectativa de un compromiso político continuo para moderar los déficit presupuestarios que son consistentes con la estabilidad macroeconómica”.
Dijo que Standard & Poor’s espera que el gobierno reduzca los gastos en caso de que los precios del petróleo caigan drásticamente, ayudando de esta manera a evitar un aumento en la deuda del sector público.
La trayectoria de la calificación de largo plazo dependerá de la capacidad del gobierno para manejar la presión fiscal derivada de menores ingresos no recurrentes, del aumento de los gastos de pensiones del sector público y de la necesidad de sostener la inversión en el sector de energía”, concluyó.
Impulsa a la bolsa
La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) finalizó ayer con una ganancia de 56.59 puntos, 0.43 por ciento más respecto al cierre previo, al ubicar a su principal indicador en 13 mil 097.12 unidades, con lo que acumula su tercer máximo histórico del año.
Este desempeño responde a las expectativas positivas de los reportes de las empresas al cuarto trimestre de 2004, así como a la mejor calificación crediticia que Standard & Poor’s otorgó a la deuda soberana de México. De esta manera, en enero el Índice de Precios y Cotizaciones registra una ganancia de 179.24 puntos, equivalentes a 1.39 por ciento respecto al cierre de diciembre pasado.
En la jornada de este día participaron 74 emisoras, de las cuales 45 cotizaron al alza, 21 a la baja y ocho se mantuvieron sin cambio; con un volumen operado de 98.2 millones de títulos por dos mil 541.9 millones de pesos.
