Elementos de Vialidad no realizan vigilancia y los paterfamilias se estacionan en doble y triple fila
En un sondeo realizado ayer a la hora de entrada y salida en algunos colegios se pudo observar el caos vial que se registra en los accesos, provocado por los padres de familia que a última hora acuden a dejar o a recoger a sus hijos.
Además se observó la ausencia de agentes de tránsito y de patrullas para regular el flujo vehicular, y sí un sistema interno modesto en el que participan los padres de familia para ofrecer seguridad en los pasos de calles.
Entre las 7:45 y las 8:00 de la mañana en la puerta principal del Colegio Inglés se genera un caos vial, por las filas de vehículos que se forman en ambas aceras, y de donde bajan niños cargando sus mochilas rumbo a la entrada.
Hay vehículos estacionados en zona amarilla, en doble fila, ruidosos claxonazos de los automovilistas que quedan atrapados momentáneamente en este desorden, que es rematado por el paso constante de los microbuses blancos.
En este sitio no hay presencia de algún tránsito o patrulla, la institución es la que dispone de una persona que hace las funciones de vigilante de la puerta y un padre de familia dotado con una paleta de alto para poner algo de orden en forma momentánea y para evitar el peligro a los infantes.
Este espectáculo se vive en esta esquina de lunes a viernes de los periodos escolares, en la mañana y también por la tarde, a la hora de salida, entre las 13:45 y 14:00 horas, cuando los padres llegan a dejar a sus hijos, o vienen por ellos, por lo regular en forma apresurada.
Otro espectáculo similar se presenta en el Colegio España ubicado en Bruno Martínez y Pereyra. Aquí el caos es un poco mayor porque son calles céntricas de la ciudad, y también se forman vehículos uno tras otro, hasta integrar una fila, que es lo que ocasiona el caos vial.
En este sitio, los padres de familia no han visto tampoco a agentes de tránsito que pudieran regular el tráfico o hacerlo un poco más ágil, ni a la hora de entrada ni a la salida.
Obviamente que las ?horas pico? son aquellas de diez o quince minutos para cerrar la entrada o para abrirla. Y nuevamente el caos que reina se hace más grande, así como el peligro por el paso del transporte urbano; aquí son los camiones cafés los que tienen su ruta por esta calle.
En el Colegio Americano, igualmente, la hora de entrada y salida se da en medio de un gran caos. A la hora de la salida, la calle Allende que baja, en su tramo del bulevar Dolores del Río a Volatín y por momentos hasta la calle Juan E. García, es un desfile de vehículos y camionetas último modelo que avanza lentamente.
El sistema que utiliza esta institución educativa para entregar a los hijos a sus padres consiste en que hay personal en las afueras entre 15 y 20 metros identificando a los padres, y por walkie-talkie dan el nombre del alumno, que está formado detrás de la puerta principal.
El personal que por radio recibe el nombre lo pone sobreaviso. El niño o la niña se alista, y sale cuando su padre, a bordo del vehículo, se para frente a la entrada. Abren la portezuela, introducen la mochila y se suben. Esta operación se repite tantas veces como niños hay.
Igualmente, en este lugar hay ausencia de tránsitos o de personal que regule la circulación de esta congestionada calle del barrio de Tierra Blanca.
Sólo de las escuelas localizadas en el medio rural en donde prevalecen temperaturas muy bajas llegaron ayer reportes de algunas incidencias de ausentismo de maestros y de alumnos, las cuales se están verificando.
Así lo dio a conocer ayer Julián Salvador Reyes, subsecretario de Servicios Educativos de la Secretaría de Educación del Estado de Durango, al señalar que, salvo esta situación, el regreso a clases se registró en forma normal en las zonas urbanas.
Destacó que hasta el próximo miércoles es cuando tendrá una evaluación más completa de la situación en los planteles del medio rural.
Afirmó que cerca de cinco mil planteles en donde se imparte educación básica, que va desde inicial a secundaria, reanudaron sus labores después del periodo vacacional de invierno.
Detalló que retornaron cerca de 400 mil alumnos de este nivel, y 75 mil de los niveles medio superior, superior y posgrado, de acuerdo con los reportes de la SEED.
En las oficinas centrales de la SEED, el trabajo administrativo y de atención al público se reanudó de manera normal.
