EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- En el terreno laboral, las personas con capacidades diferentes siguen experimentando el rechazo de quienes están al frente de las empresas porque se les cataloga con un alto riesgo de sufrir o provocar accidentes, en una especie de subestimación de todo el potencial que pueden llegar a desarrollar.
María del Refugio Ávila y Cecilia Rosales, trabajadoras sociales del Centro de Atención Múltiple Laboral número 31, dijeron que ese tipo de actitudes, son obstáculos contra los que hay que luchar diariamente.
?Con nuestra intervención hemos pedido oportunidades y hemos logrado abrir puertas, para que algunos de nuestros muchachos sean aceptados y desempeñen un trabajo como cualquier otra persona, que se integren a la sociedad a la que pertenecen?, indicó Cecilia Rosales.
Por desgracia, según señalaron, en algunas empresas persiste el criterio de que quienes tienen alguna capacidad diferente habrán de generarles problemas y se rehúsan a contratarlos, sin tomar en cuenta que ellos tienen todo el derecho de realizar cualquier actividad que su cuerpo y su mente les permita.
?Antes que incurrir en esta actitud de discriminación, debemos pensar que nadie estamos exentos de vivir una situación así, pues un accidente nos puede cambiar la vida y encontrarnos en una situación similar?, expresó María del Refugio Ávila.
El Centro de Atención Múltiple Laboral número 31 atiende a 90 jóvenes de 14 a 24 años de edad con deficiencia mental que son canalizados por las escuelas primarias o secundarias regulares, en la realización de talleres de tapicería, cocina, corte y confección, reparación de calzado, panadería y un taller múltiple, el cual tiene como propósito integrarlos al medio laboral.
La institución depende de la Secretaría de Educación Pública y recibe donativos de diversas agrupaciones.