Juan Manuel Aguirre Guardado, de 22 años, fue encontrado muerto de seis balazos; tres en la cabeza, uno en el cuello, otro más en el hombro y el último en el brazo izquierdo. El cuerpo se localizó en la parte posterior del panteón de Canatlán, informó la Policía Ministerial del Estado.
La necropsia de ley reveló que Juan Manuel, quien tenía su domicilio en el Barrio de los 30 Viejos, había perecido en la madrugada del martes.
Según los datos proporcionados por la madre del fallecido, María Guardado Rocha, misma que identificó el cuerpo, Juan Manuel salió de su hogar el lunes por la noche, aproximadamente a las 21:00 horas, diciendo que acudiría a la Feria y que regresaba más tarde.
En las instalaciones de la Feria, hubo varias personas que lo vieron en compañía de otros sujetos consumiendo bebidas embriagantes y divirtiéndose, pero ya en la madrugada no se supo nada de él por ningún lado.
En primera instancia se presume que por el excesivo consumo de alcohol se pudo haber producido una riña entre sus amigos y que probablemente lo balearon y lo tiraron en el terreno mencionado, pues a decir de los primeros análisis periciales, el hoy occiso no murió en el lugar donde se encontró el cuerpo, sino que fue ejecutado en otro lado y arrojado en ese sitio para despistar a las autoridades.
Las heridas que se le apreciaron con proyectil de arma de fuego fueron en el rostro, temporal derecho, occipital, cuello, brazo izquierdo y hombro de lado derecho.
La Policía Ministerial se aboca a la investigación de amigos y testigos que lo vieron en la Feria para dar, primeramente, con las personas que lo acompañaban y posteriormente con los responsables del homicidio, si es que no son los mismos ?camaradas? los que lo asesinaron.
