Carece el centro de colchones y cobijas suficientes
EL SIGLO DE TORREÓN
GÓMEZ PALACIO, DGO.- La mayoría de los niños andan descalzos. Duermen en el suelo sobre cobijas y se cubren en las noches con lo que encuentran. La vivienda es humilde, pero para ellos, representa un espacio seguro, donde no sufren como en su verdadero hogar.
Desde hace tres meses, la vivienda ubicada en el interior uno de la avenida Allende número 613 se convirtió en una casa de restauración para hombres y mujeres, donde se brinda apoyo a personas con problemas familiares y de adicciones.
Gerardo Torres Salazar, coordinador del albergue, dice que aquí se brinda atención a las personas que así lo requieren, para que puedan rehabilitarse, salir de su problemática y reintegrarse a la sociedad.
De momento, hay 30 personas que han buscado refugio en esta humilde vivienda, que carece de suficientes colchones y cobijas para atenderles, pero poco a poco se han hecho de ropa, zapatos y comida, a través de diversos apoyos.
Torres Salazar explica que, en varias ocasiones, se ha buscado el apoyo de la Presidencia Municipal a esta causa, pero aunque no se les ha negado, han pasado ya tres semanas desde que comenzaron a solicitar la ayuda y no han recibido respuesta.
Los inquilinos son niños de dos años hasta adultos de 35, mujeres que han sufrido maltrato por parte de sus parejas, pequeños sin hogar o abandonados, una señora embarazada y sola, jóvenes con problemas familiares y adictos a las drogas.
Gerardo Torres señala que todos viven en el mismo sitio, ante la falta de espacios, pero se pretende abrir otra casa similar, para que en una se albergue únicamente a mujeres y en la otra a los varones, además de que se podría ofrecer una mejor atención.
Apoyo
El albergue ubicado en el interior uno de la avenida Allende número 613 norte, solicita del apoyo de los gomezpalatinos que puedan brindar ropa y cobijas para las personas que han atravesado por situaciones de violencia o adicciones y se rehabilitan aquí.
- Colchones.
- Cobijas, cobertores, mantas.
- Ropa, zapatos.
- Comida.
FUENTE: Gerardo Torres, coordinador del albergue