?A mitad de río no se
cambian mulas?
Refrán popular
A nivel internacional Alan Greenspan aseguró en una conversación semiprivada que mantuvo con el Ministro de Finanzas de Francia Thierry Breton en el marco de la reunión de ministros de Finanzas y presidentes de Bancos centrales del G7 que tuvo lugar en Washington, que en su opinión Estados Unidos ha perdido el control de su déficit público. Posteriormente moderó sus declaraciones refiriéndose entre otras cosas al peligro de la burbuja inmobiliaria declarando que la gran mayoría de los propietarios tienen un buen amortiguador en el valor acumulado, con lo que podrían absorber una posible baja en el precio de las casas; sin embargo ambas declaraciones no deben de pasar desapercibidas y hay qué considerarlas dentro de un futuro no muy lejano.
Por otra parte nuestro país si bien es cierto que mantenemos parámetros económicos favorables como la inflación, tipo de cambio, tasas de interés, y reservas internacionales suficientes que nos permiten mantener una estabilidad macroeconómica optimista, tendremos qué considerar aspectos que ya he mencionado en otras ocasiones y que por razones obvias considero no hay necesidad de profundizar pero sí la necesidad de considerarlas para nuestra toma de decisiones: de acuerdo con la reciente información del Fondo Económico Mundial, México perdió siete lugares en la clasificación mundial en lo que se refiere a competitividad, por otra parte los elevados índices de criminalidad en algunas partes del país inhibe la inversión extranjera, disminuyendo la posibilidad de abatir el desempleo y la parálisis en la ejecución de políticas fundamentales impiden la implementación de las reformas estructurales que necesitamos para hacer frente a la competencia externa.
Desafortunadamente no se observa por parte del Gobierno Federal así como del Poder Legislativo acciones contundentes para superar éstos problemas y poder reactivar la economía en donde las decisiones políticas juegan un papel muy importante; sin embargo en los últimos días estamos presenciando una serie de movimientos en las altas esferas del Gobierno que sin duda denotan que no existe un verdadero control y al puro estilo político de antaño se están realizando cambios que principalmente ponen de relieve la primacía y los intereses personales a los fundamentales de nuestro país:
Cómo explicar la aceptación en la renuncia del secretario Usabiaga dejando en su agenda una serie de asuntos sin resolver destacando la de los cañeros y sobre todo para promover su precandidatura dentro del Partido Acción Nacional (PAN) a la gubernatura de Guanajuato no obstante que por el momento figura en un tercer lugar en sus posibilidades; así mismo muy parecido el caso del secretario de Energía Fernando Elizondo, quien mencionó sus deseos de competir por una Senaduría de su estado natal no obstante que queda tiempo sobrado para su futura precampaña como si la secretaría en cuestión no fuera una de los principales soportes en nuestro país y para terminar en éste desaseo político se cambia a dicha secretaría a Fernando Canales que supongo debe de estar capacitado para manejar ésta área tan especializada y estratégica. Sin saber en éstos momentos el rumbo que tendrá el problema del IMSS con la posible salida de Gustavo Levy para satisfacer a los líderes sindicales y posiblemente pasar sobre la ley con el objeto de atender las demandas desmesuradas de los mismos a pesar de la situación económica que prevalece en ésta institución.
Entre otras cosas me confieso escéptico del reciente y tan festinado acuerdo de unidad que se acaba de firmar promovido y firmado por la Iniciativa Privada en éstos días en el cual sin embargo percibo como muy general y sin compromisos concretos para los participantes así como la estrategia que se piensa adoptar para llevar a cabo éstos acuerdos; no niego que es siempre imprescindible y necesario el diálogo que la confrontación, pero también debe ser la constancia y como antes dije el compromiso para concretar estos pactos.
