EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Desde el Lejano Oriente, Yayeng Wang llega a La Laguna como una conexión entre la cultura china y la mexicana, en un mundo cada vez más globalizado.
Y es que el originario de la provincia de Tianjin City, será el encargado de la nueva clase de mandarín en el Centro de Aprendizaje de Idiomas (CAI) de la Universidad Autónoma de La Laguna (UAL) a partir de este lunes.
Yayeng se aventuró a dejar su trabajo en una compañía que prestaba asesoría legal para viajar miles de kilómetros al otro lado del mundo, ya que confiesa que siempre le interesó el aprendizaje de idiomas.
?Una institución en China anunció en el periódico que solicitaba un maestro de mandarín para viajar a México?, recuerda. Y no dudó ni un segundo, hizo sus maletas y de pronto ya estaba en el Nuevo Mundo.
Desde hace unas días su residencia es Torreón, en donde planea vivir por espacio de un año. Durante este tiempo se dedicará a compartir su idioma y su cultura con los laguneros, y dejará de lado su carrera de abogado.
Además, dice que le gustaría enseñar a sus alumnos más sobre su país, que tengan una visión de la ?nueva China?, que, aclara, en nada se parece a la comunista Cuba. Desea que los estudiantes conozcan la historia más allá de Mao Tse Tung, su máximo líder, o del gran Confucio.
Aunque no habla español, Yayeng ya ha aprendido a decir ?hola? y ?gracias?, y no disimula su encanto por la calidez con que ha sido tratado.
El chino mandarín es el mayor dialecto de la familia de lenguas china, con más de 836 millones de hablantes. Sirve de lengua franca a hablantes de distintos dialectos chinos. Es el idioma oficial en China, Taiwán y Singapur, y hablado en Hong Kong, Indonesia y Malasia. Además, es uno de los seis idiomas oficiales de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Conciente de que aprender mandarín es mucho más difícil que cualquier otro idioma, Yayeng invita a los laguneros a inscribirse en el curso que inicia la próxima semana en el CAI de la Universidad Autónoma de La Laguna. Mayores informes al teléfono 718-55-33.
Con todo el cerebro
Las personas que hablan mandarín usan más áreas del cerebro que quienes hablan inglés, aseguran científicos en un hallazgo que brinda nueva información sobre la manera en que el cerebro procesa el lenguaje.
-A diferencia de los anglohablantes, que usan un lado de su cerebro para comprender el lenguaje, los científicos de la organización británica no lucrativa Wellcome Trust descubrieron que se utilizan ambos lados del cerebro para interpretar las variaciones de sonido en mandarín.
-?Nos sorprendió descubrir que las personas que hablan diferentes tipos de idiomas usan su cerebro para decodificar el lenguaje en diferentes formas; lo que derrocó algunas teorías sostenidas por mucho tiempo?, según Sophie Scott, psicóloga de la institución caritativa.
-Scott utilizó tomografías cerebrales en voluntarios y descubrió que se usan áreas diferentes del cerebro para interpretar las palabras y la entonación.
-Cuando las personas que hablan inglés escuchan su lenguaje se activa el lóbulo temporal izquierdo del cerebro, pero los que hablan mandarín usan tanto el lóbulo izquierdo como el derecho, que normalmente se utiliza para procesar la melodía en la música y el lenguaje.
-La entonación es importante en el mandarín, porque da diferentes significados a la misma palabra. La palabra ?ma?, por ejemplo puede significar madre o caballo, dependiendo del tono.
-?Pensamos que quienes hablan mandarín interpretan la entonación y la melodía en el lóbulo temporal derecho para dar el significado correcto a la palabra hablada?, asegura Scott.
-La científica considera que la investigación podría aportar información sobre lo que sucede cuando a los pacientes se les obliga a adquirir de nuevo la comprensión del lenguaje tras un accidente cerebrovascular.
-?Parece que la estructura del lenguaje que se aprende de niño afecta la manera en que se desarrolla la estructura del cerebro para decodificar el lenguaje. A los anglohablantes nativos, por ejemplo, les resulta extraordinariamente difícil aprender mandarín?, concluye Scott.
FUENTE: Reuters