Shanghai (EFE).- Los estudiantes de secundaria de Shanghai, principal metrópolis financiera china, y en su mayoría hijos únicos, aprenderán a dar las gracias a partir de septiembre, cuando regresen a las aulas, informó la agencia oficial Xinhua.
La comisión de educación municipal editó esta semana una nueva regulación en las escuelas para impartir clases de comportamiento y moral, con lo que se "enseñará a los estudiantes a dar las gracias a los demás".
"Es esencial para los jóvenes de hoy, en su mayoría hijos únicos, aprender a expresar gratitud a otros", señaló Zou Hong, responsable de la Comisión Educativa para Cultivar la Moral.
La generación de hijos únicos, producto del control demográfico chino aplicado desde hace 25 años, es conocida como la de los "pequeños emperadores".
"Son egocéntricos y tienen que aprender a dar las gracias por todo lo que disfrutan. Sólo después de esto podrán de manera consciente amar a los demás y contribuir a la sociedad", añadió Zou.
Una profesora de la Escuela de Secundaria de Daijing, Zhou Jing, se quejó sobre los padres, que rechazan transmitir una moral a sus hijos mientras les exigen el máximo rendimiento en sus resultados académicos.
"Esta negligencia podría desembocar en el egoísmo de los hijos", dijo Zhou.
La nueva normativa, una revisión de una anterior editada hace dos años en la metrópoli, podría servir como recordatorio para esos padres negligentes, según la profesora, y también para otros docentes.