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ROMA, ITALIA.- El Papa Juan Pablo II bendijo ayer a los fieles desde la ventana de su habitación en la Policlínica Gemelli de Roma, luego que el sustituto de la Secretaría de Estado, Leonardo Sandri, celebrara en su nombre la misa dominical del Ángelus.
El pontífice, rodeado de sus colaboradores y médicos, permaneció por varios minutos ante la ventana y lució más recuperado que la semana pasada, cuando sorpresivamente se asomó desde su habitación a tres días de haber sido sometido a una traqueotomía.
Antes de recitar la misa desde el sagrario de la Basílica de San Pedro, Sandri leyó un mensaje en el que Juan Pablo II reiteró su agradecimiento ?por las muchas señales de afecto que me llegan?.
?En especial agradezco a los numerosos cardenales, obispos, sacerdotes y grupos de fieles, a los embajadores y delegaciones ecuménicas que han venido estos días al Policlínico Gemelli?, señaló el Papa en el texto leído por Sandri.
?Deseo manifestar especial reconocimiento por la cercanía a los creyentes de otras religiones, especialmente hebreos y musulmanes. Algunos de ellos han querido venir a rezar aquí al hospital. Este es para mí un signo consolador, por el cual agradezco a Dios?, añadió.
Asimismo, el pontífice llamó a ?continuar juntos la preparación para la Pascua, ofreciendo a Dios también el sufrimiento, por el bien de la humanidad y por nuestra purificación?.
?En la página evangélica de hoy, curando al nacido ciego, se presenta como la luz del mundo. Él ha venido para abrir los ojos del hombre a la luz de la fe. Sí, queridísimos, la fe es la luz que guía el camino de la vida, es flama que consuela en los momentos difíciles?, dijo.
Recordó que cuando nace un niño se dice que ?viene a la luz?. ?Para los creyentes, nacidos a la vida sobrenatural con el bautismo, la Cuaresma es tiempo favorable para venir a la luz, es decir, para renacer del Espíritu, renovando la gracia y el compromiso bautismales?, indicó.
?Que nos ayude María Santísima a obtener de Cristo el don de una fe cada vez más clara y más fuerte, para que podamos ser coherentes y valientes testimonios de su Evangelio?, concluyó.
Durante la misa pronunciada por Sandri, el Centro Televisivo Vaticano difundió las imágenes del pontífice que, rodeado de colaboradores y médicos, seguía la ceremonia desde el hospital sentado en una silla de ruedas y orando.
Afuera del Gemelli cientos de fieles de todo el mundo aplaudieron la aparición de Juan Pablo II.
Se trató de la tercera misa dominical del Ángelus que el Papa siguió desde el Gemelli si se considera su primera hospitalización, que duró del primero al diez de febrero pasado.
El 24 de febrero Juan Pablo II fue nuevamente internado por una crisis respiratoria y sometido a una traqueotomía. Hasta ahora no hay fecha definida para que regrese al Vaticano, aunque no se excluye que sea antes del Domingo de Ramos, que cae este año el 20 de marzo, y que es seguido por la Semana Santa.
El próximo comunicado sobre la salud de Juan Pablo II es esperado para hoy.
