Confían en la relación con el nuevo Gobierno estatal y que se dé trato igualitario a contratistas
El Colegio de Ingenieros Civiles de Durango (CICD) confía que en este gobierno terminará la irregular inercia de privilegiar sólo a unos cuantos contratistas en la licitación y asignación de la obra pública estatal, como ocurrió con excesos en el pasado.
Gabriel Montes Casas, actual líder del gremio de la ingeniería civil en la entidad, se mostró seguro de ello tras lamentar que en años anteriores fue marcado el nivel de marginación que sufrió la mayor parte de los edificadores, mientras un pequeño segmento obtenía el grueso de los contratos.
El Presidente de dicho colegio de profesionistas lamentó que en el sector de la obra pública se mantengan vigentes añejos vicios como el llamado ?cochupo?, es decir los arreglos ilícitos para obtener condiciones ventajosas en la adjudicación de contratos.
Sin embargo, Montes refirió que el gobernador Ismael Hernández Deras ya les fijó dos condiciones elementales de trabajo para combatir de raíz ese tipo de anomalías: 1.- Los contratistas deberán estar legal y formalmente constituidos y consolidados; y 2.- La exigencia de calidad y cumplimiento de plazos será ineludible a los contratos.
El ingeniero civil señaló que ésa fue la exigencia y el llamado que les hizo el mandatario estatal, Hernández Deras, durante el evento de la toma de protesta del Consejo Directivo que él preside en el CICD.
El primer diagnóstico que hizo Montes Casas en la entrevista con este diario fue tajante: ?No tenemos trabajo. Muchos contratistas están desempleados en la actualidad?.
Pero luego, él mismo recalcó que en las dependencias de los tres niveles de gobierno los concursos de obra están por iniciar y, de esa forma, se reactivará con expectativas importantes la obra pública en condiciones de mayor equidad para todos los constructores.
PROLIFERAN
Como parte de las anomalías que vivió la industria de la construcción, el entrevistado expuso que en el 2004 ?cualquier persona se hacía contratista con facilidad y con inmediato acceso a contratos por adjudicación directa?.
Empero, Gabriel criticó esa situación porque simplemente el padrón de constructores de la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas del Estado (Secope) se incrementó más de 70 por ciento el año pasado, en contraste con los niveles de obra, que no subieron en comparación con el 2003.
En ese sentido expuso que el padrón de Secope históricamente se mantenía en 200 contratistas, pero entre los años 2003 y 2004 se disparó a entre 320 y 340 empresas autorizadas para ejecutar obra pública estatal.
Dijo: ?El año pasado surgieron muchas empresas que se mantenían con obra asignada permanentemente, y crecieron a la sombra de las adjudicaciones directas siendo solamente ellos los beneficiados.
?... Ahora, las adjudicaciones son válidas y las contempla la ley, pero se prestan a la opacidad, a la tranza y la discrecionalidad, y más cuando el privilegio fue para unos cuantos y se desplazó a los demás. Al menos 40 empresas se fortalecieron así en el 2004, cuando acababan de nacer ese mismo año?, concluyó.
CALIDAD
Exigencia oficial
La primera exigencia del gobernador Ismael Hernández Deras al gremio de la construcción radica en que trabajará sólo con las empresas establecidas y consolidadas, mientras la segunda petición oficial implica que éstas deberán cumplir con calidad y tiempos para que sea óptima la relación Gobierno-contratistas.
En ese sentido, el Colegio de Ingenieros Civiles de Durango opinó sobre la necesidad de que en los contratos y licitaciones se apliquen criterios en los que no se privilegie a las propuestas económicas más baratas, sino a las ternas de trabajo que garantizan calidad y factibilidad en tiempos.
?El problema del pasado es que cuando se concursaban obras con tal de ganar los edificadores le bajábamos a la propuesta económica a niveles que lo único que provocaban eran retrasos e incumplimiento. Además en muchos de los casos esto se complicaba porque había consentimiento de las autoridades, y las obras se terminaban de mala calidad?, dijo Gabriel Montes Casas, presidente del Colegio.