CRÓNICA URBANA
EL SIGLO DE TORREÓN
GÓMEZ PALACIO, DGO.- Santos López tiene 68 años y se dedica a la agricultura y el cuidado de 15 chivas.
De estatura baja, aspecto cansado y complexión robusta, el sexagenario recorre diariamente más de diez kilómetros para que sus animales hagan ejercicio y se alimenten, acompañado siempre por su fiel perro pastor, al que las chivas obedecen sin problema, a pesar de que es un can muy pequeño.
?Es un perrito callejero, me ayuda a tener las chivas juntas?, comenta.
Este campesino vive en el ejido Emiliano Zapata, de Gómez Palacio. Confiesa que el trabajo apenas alcanza para mantener a su esposa e hijos, pero se siente feliz porque se desempeña en una labor honrada y no le falta sustento.
?Sale para comer?, manifiesta el señor, ?nos va bien, es lo que podemos decir, nos alcanza para vivir, que es lo importante?.
Cuenta que ha sido agricultor desde que dejó la escuela, cuando terminó el tercer grado de primaria, entonces comenzó a sembrar con sus familiares, luego a lo que salía, como jornalero. Hace 30 años que cuida a sus chivas, ayudado por su perro, entrenado para cruzarles la carretera y alejar a los extraños.
Santos señala que en múltiples ocasiones consideró regresar a la escuela y terminar la primaria, pero la falta de recursos económicos en su familia le llevó a buscar trabajo desde joven. Culpa también a la desidia, pues dice que dejó pasar más tiempo del necesario y hoy le parece que ya no tiene caso retomar sus estudios.
El ?chivero? recuerda que, en décadas anteriores, hubo un mayor apoyo a los campesinos por parte del Gobierno, para él, todo aquello son sólo memorias, pues considera que la situación actual es muy difícil precisamente porque ya no se aporta ayuda a los agricultores.
Continúa su recorrido hacia el ejido Zapata, donde le esperan su esposa y sus nietos, pues sus cuatro hijos ya son casados y tienen familias propias. Su cuerpo luce frágil y por momentos, las chivas lo dejan muy atrás, pero el sexagenario acelera el paso y las alcanza.
?Está difícil, para el campo, está difícil para la ciudad, hay crisis para todos?, agrega y se aleja entre los ladridos de su fiel cachorro.
