EL SIGLO DE TORREÓN
CD. LERDO, DGO.- La violencia se ha convertido en un fenómeno tan cotidiano que las sociedades tienden a naturalizarlo y a dejar de percibirlo, dijo Teresa Pérez Vázquez, investigadora y consultora de violencia de género.
La especialista, quien además trabaja en la integración del organismo no gubernamental, Centro de Estudios de Equidad y Género, Políticas Públicas para el Desarrollo, sostuvo que incluso, la violencia es una de las principales estrategias que se aplican en la educación formal mediante castigos o agresiones físicas.
Los feminicidios ocurridos en Ciudad Juárez, han abierto los ojos ante la realidad de que estos crímenes no sólo ocurren en ese entorno, sino en muchos otros lugares del país; en esa medida, la sociedad ha dejado de percibir el problema en toda su magnitud.
Por otra parte, hay formas de violencia que están mucho más presentes de lo que se piensa, como el abuso sexual en niños y niñas en el entorno educativo, que aunque es un hecho tan común es a la vez muy silenciado, por lo cual no se refleja en estadísticas de denuncias o acusaciones contra quienes lo ejercen.
Pérez Vázquez hizo referencia a que aún no se alcanzan los niveles óptimos dentro de una cultura de denuncia en nuestro país, pues ?no se hace por miedo, por vergüenza y por la falta de redes de apoyo a las víctimas, además de que hay de antemano un hecho de estigmatización y falta de escucha en la sociedad que hace aún más difícil abordarlo?.
La investigadora, que también forma parte del Colegio de México, imparte un curso taller de actualización al personal de las dependencias que atienden el fenómeno de la violencia intrafamiliar.
En este sentido, dijo que el sentir de los especialistas en el tema es que se descuida en forma recurrente el autocuidado y manejo de este fenómeno en el personal que atiende a mujeres y niños maltratados, lo que de manera paulatina repercute en un daño de su salud mental.
La resistencia a una vida más placentera o a convivir con la familia, llevar los problemas del trabajo a la casa; la relación de pareja, la sexualidad o en la relación con los hijos; volverse hipervigilantes a cualquier tipo de violencia o la sobreprotección de los hijos o el marido, son algunos de los ?síntomas? de quienes están involucrados en la atención de la problemática.
Además de ver afectada su situación personal, desde su postura de servidores públicos dejan de atender humanamente a quienes piden ayuda, o por el contrario, se vuelcan tanto en proporcionar ayuda a las víctimas que se olvidan de sí mismos.
?Se escuchan tantas historias violentas diariamente que se tiende a revictimizar o culpabilizar a la mujer de su problema, además de que se genera una resistencia o distancia hacia el conflicto y esto pasa en quienes se desempeñan en las áreas de salud, educación o procuración de justicia?, de ahí que ya se trabaja en la elaboración de medidas de autocuidado.
Participan en taller
Personal de la Dirección de Atención a la Mujer, Centro de Salud, Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia, Dirección de Seguridad Pública Municipal y otras dependencias, participa en el curso taller de autocuidado para la atención de la violencia de género, mismo que concluirá el próximo sábado.
La directora de Atención a la Mujer en el Municipio de Lerdo, María del Rosario Aldaba González, reconoció la necesidad de capacitar al personal de todas estas áreas en la atención del fenómeno de la violencia intrafamiliar, el cual llega a experimentar extenuación, cansancio y malestar físico por el contacto diario con víctimas y hechos de agresiones físicas, verbales, psicológicas o sexuales.
La tarea de capacitación en el autocuidado, también se realiza previendo que en los próximos dos o tres meses, el Municipio pondrá en operaciones el centro de resguardo para víctimas de la violencia de género, cuyas instalaciones ya son habilitadas y que tendrá capacidad para atender a seis personas cuya integridad esté en riesgo al permanecer junto a sus agresores.
Según Aldaba González, este fenómeno es creciente en Lerdo y en la sociedad en general, dado que no se atribuye específicamente al consumo de drogas o a los problemas económicos, sino a la enseñanza generacional de toda una cultura de desvalorización hacia la mujer.
Atención a víctimas
Los alcances de la violencia intrafamiliar en la sociedad hacen necesario reforzar la atención a quienes la padecen, así como la capacitación permanente de las personas encargadas de tratar a las víctimas.
·Se estima que en los próximos dos o tres meses, comenzará a funcionar la casa de resguardo para víctimas de violencia extrema en Lerdo, que servirá para proteger la integridad de mujeres e hijos.
·En el transcurso de un año, se atendió a mil 600 mujeres, el 65 por ciento de éstas por violencia intrafamiliar en todas las modalidades: física, verbal, psicológica, sexual y económica.
FUENTE: Dirección de Atención a la Mujer del Municipio de Lerdo
