SUN-AEE
QUITO, ECUADOR.- Lucio Gutiérrez, hasta el miércoles presidente de Ecuador, espera un salvoconducto para poder viajar a Brasil con seguridad y zafarse así del asedio de decenas de ciudadanos que le culpan de todos los males que afligen al país.
El Gobierno de Alfredo Palacio, que fue vicepresidente de Gutiérrez y que ahora ocupa su puesto por sucesión constitucional, anunció que no pondrá reparos y que concederá el salvoconducto para que su antecesor pueda ir a Brasil.
Esa medida obliga a la fuerza pública a garantizar la integridad física de Gutiérrez, en el trayecto que separa la embajada de Brasil en Quito, donde se refugió tras ser destituido por el Congreso, del aeropuerto internacional “Mariscal Sucre”, donde debe abordar una aeronave brasileña.
Y es que Gutiérrez, pese a que ya abandonó el cargo, es aún el centro de la rabia de los quiteños, que en masa se lanzaron desde el pasado 13 de abril a las calles para pedirle que dimitiera.
Las multitudinarias protestas finalmente obligaron a que el Congreso, también devaluado ante la opinión de la ciudadanía, le destituyera el miércoles bajo el cargo de “abandono de poder”, cuando aún permanecía en su despacho aferrado al sillón presidencial.
Gutiérrez abandonó el Palacio Presidencial el miércoles por la tarde en un helicóptero, que fue seguido hasta el aeropuerto, donde muchas personas arriesgaron sus vidas para impedir el despegue de la avioneta en la que aparentemente pretendía abandonar el país junto a su esposa y dos hijas.
Después de algunas horas de incertidumbre, el Gobierno brasileño confirmó que Gutiérrez se había refugiado en su embajada en Quito y horas después se anunció que el presidente de ese país, Luiz Inácio Lula da Silva, había concedido el asilo territorial al ex gobernante.
La Fuerza Aérea de Brasil ha ordenado a uno de sus aviones que esté preparado para “rescatar” a Gutiérrez. Grupos de ciudadanos hacen guardia a las afueras de la embajada y protestan por la decisión de Brasil por considerar que Gutiérrez debe responder ante la justicia ecuatoriana, entre otras cosas, por la muerte del fotógrafo chileno Julio Augusto García, que murió en las protestas del martes.
Los manifestantes también hacen responsable al ex gobernante de las muertes de una mujer y un joven, cuyos fallecimientos se relacionan con las movilizaciones del miércoles.
En el Palacio Presidencial se ha informado de que la concesión del salvoconducto es un asunto que está fuera de toda discusión, pues es una obligación incluida en la Convención Internacional de Asilo Diplomático, de la cual Ecuador es signatario.
“Por supuesto” que Ecuador concederá el salvoconducto a Gutiérrez, “tiene que hacerlo”, aseguró el nuevo canciller de la República, Antonio Parra Gil, tras reconocer que su país está imposibilitado de emprender alguna acción para detener el asilo.