Washington, (EFE).- La esperanza de vida de los estadounidenses alcanzó el nivel récord de 77.6 años en 2003, frente a los 77.3 años correspondiente al año anterior, informaron las autoridades sanitarias de Estados Unidos.
Según el informe divulgado por los Centros de Control de Enfermedades (CDC, en inglés), este incremento se debió, sobre todo, al descenso del número de fallecimientos por enfermedades del corazón (3.6 por ciento), cáncer (2.,2) o por derrame cerebral (4.6 por ciento).
Al margen de estas tres enfermedades, que son las que más muertes causan, el informe precisa que el índice de mortalidad bajó ese año en ocho de las quince afecciones consideradas como causas principales de muerte, entre las que también figuran el suicidio, la gripe o los accidentes.
Por el contrario, se incrementó el nivel de fallecimientos por Alzheimer, Parkinson o hipertensión.
El documento, titulado "Muertes: datos preliminares de 2003", precisa que también contribuyó al incremento de la esperanza de vida la reducción del índice de mortalidad por sida, abuso de drogas y alcohol, y armas de fuego.
Los datos confirman la existencia de disparidades en función de la raza, ya que, entre los blancos, la tasa de mortalidad por cada 100.000 personas bajó en 2003 un 2.1 por ciento en el caso de los hombres y 1.2 por ciento en el de las mujeres.
Entre los hispanos, el índice bajó un 4.2 por ciento en el caso de los hombres y un 1.8 por ciento, en el de las mujeres.
Y entre los negros, los descensos fueron de un 2.5 por ciento para los hombres y 2.4 por ciento para las mujeres.
Según el informe, en 2003 se produjeron un total de 2,443,930 fallecimientos en Estados Unidos.
Aunque las mujeres se mantuvieron por delante de los hombres con una esperanza de vida de 80.1 años, frente a 74.8, la diferencia de sexo se redujo a 5.3 años.