Torreón, Coah.- Ramón Espinosa resultó con fractura en la mano y perderá el resto de la temporada, con lo que el outfield importado de Vaqueros Laguna quedó completamente desintegrado.
El pelotero dominicano fue golpeado por un lanzamiento de Pablo Joel Ochoa, el jueves durante el último de la serie frente a los Sultanes de Monterrey, y fue llevado al hospital, en donde se le tomaron las placas que confirmaron la lesión.
De cara al arranque de la temporada 2005 de la Liga Mexicana de Beisbol, la directiva de Vaqueros Laguna planeó el equipo con un outfield completamente extranjero; el venezolano Rafael Álvarez en el jardín izquierdo, el dominicano Ramón Espinosa en el central y el también quisqueyano, Rudy Pemberton, en la pradera derecha.
Álvarez se fracturó un dedo durante la bronca en aquel juego contra los Tigres, en el Estadio de la Revolución, cuando Javier Robles agredió con el casco a Ben Rivera. Después de haber sido intervenido, la situación de Álvarez se complicó, por lo que dejó su sitio a su paisano Elio Serrano.
Posteriormente, Rudy Pemberton fue dado de baja por no obtener de él los resultados que se esperaban, y ahora le toca el turno a Ramón Espinosa, que hasta el día de su lesión se había convertido en pelotero clave de Vaqueros Laguna, tanto por la seguridad que aporta con el guante, como por su ofensiva.
Espinosa se queda con 102 imparables conectados, para ocupar la segunda posición en toda la liga; en dobles marchaba como líder, al acumular 27. El dominicano tenía en su haber 36 batazos de extrabase, como tercer lugar en la liga.
Defensivamente cubrió en ocho ocasiones la primera base y en 57 ocasiones se hizo cargo del outfield, siempre como una garantía para el equipo lagunero.
