EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Los estafadores telefónicos volvieron a las andadas y ahora lograron engañar a los integrantes de una familia, que despojaron de cinco mil pesos, depositados en una cuenta bancaria.
Fueron integrantes de la familia Olivo, quienes el pasado fin de semana recibieron dos llamadas telefónicas, que fueron suficientes para elaborar el fraude.
La primera llamada, la hizo un supuesto sobrino con residencia en Estados Unidos, que amablemente se comunicó con su familia y hasta les dijo que le pidieran obsequios, que llevaría consigo durante el viaje.
Al día siguiente se recibió la segunda llamada, donde el ?sobrino? con voz alterada, le decía a su familia que estaba retenido en la frontera y que agentes aduanales lo iban a encarcelar por llevar un cargamento de fayuca.
El ?sobrino? les dijo que la mercancía eran los regalos que les había prometido y que un comandante le dijo que llamara a su familia para constatar que era una persona honrada y que no se dedicaba al comercio de artículos de procedencia extranjera.
La astucia de los estafadores orilló a la familia Olivo a caer en el engaño y finalmente depositaron cinco mil pesos en un número de cuenta de determinado banco nacional a nombre de un tal Ricardo Vargas García, y así ayudar para la liberación del ?sobrino?.
Ya con calma, la familia empezó a cuestionar la identidad del pariente extranjero y con unas llamadas descubrieron que el verdadero sobrino nunca había radicado en Estados Unidos.
Los afectados detectaron que las llamadas se hicieron de dos números de Guadalajara, Jalisco, el primero 01-333-555-0000 y el segundo 01-331-271-3575, el tercer número apareció registrado como 029-999-9999.
Por último, los afectados lograron investigar que el mismo día de las llamadas, otras personas de apellido Olivo fueron contactadas probablemente por los mismos estafadores, lo que hace suponer que los maleantes se auxilian del directorio telefónico, hasta que ubican a sus víctimas.
