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SAN JUAN, PUERTO RICO.- La actriz puertorriqueña Roselyn Sánchez se encuentra frente a uno de sus estrenos en la pantalla grande que más le ilusionan, con la puesta en los cines de Cayo, la primera película filmada en territorio boricua.
?Es una gran diferencia (un filme local y uno hollywoodense). Esta es mi tierra y se hace con un poquito de más corazón?, comentó Sánchez al periódico local Primera Hora en la premier de Cayo la noche del miércoles en Caribbean Cinemas de Montehiedra.
?Estoy contenta, feliz, loca por verla. Estoy loca por ver de frente la reacción de la gente. Si a la gente le gusta, si se ríen, si llora, cómo ven la película. Por lo menos yo la vi espectacular. La gente sabe que digo lo que pienso y cuando la vi dije: ¡Guau!?.
En un guión de Ineabelle Colón y Pedro Muñiz, Cayo es una producción puertorriqueña que le permitió a la actriz de Rush Hour 2 y Chasing Papi trabajar con veteranos como Carlos Esteban Fonseca, Idalia Pérez Garay, José Félix Gómez y Raulito Carbonell.
Sánchez, quien espera por los estrenos de The Perfect Sleep, Pool Hall Prophets y Venus & Vegas, reiteró que estrenar un filme siempre la colma de ilusión, pero en esta ocasión, la emoción es distinta por tratarse de una película nacional.
En la cinta Cayo, dirigida por Vicente Juarbe, Roselyn interpreta a Julia en sus años de adolescencia, ya que la película entremezcla tres tiempos para presentar la vida de esta mujer y de Iván, su gran amor.
La niñez de Julia está a cargo de Daniaris Rodríguez y la etapa adulta la interpreta Idalia Pérez Garay, en una producción cuyos trabajos fueron desarrollados en tres años.
El personaje de Iván es interpretado en orden por Gerardo Rodríguez, Kamar de los Reyes y Carlos Esteban Fonseca. Julia e Iván siembran la semilla del amor desde niños, época en la que también compartían con el amigo de ambos, Kike, encarnado en la pantalla grande por los actores Joshua Rosado Berríos, Iván Camilo y José Félix Gómez, indicó el rotativo.
Estos tres chicos inseparables se distanciaron cuando Iván tuvo que partir a la guerra de Vietnam y le pide a su mejor amigo que cuide de Julia; en su ausencia, Julia y Kike se dejan llevar a una experiencia romántica.
La relación termina cuando Julia decide viajar a la ciudad de Nueva York y establece su hogar con Iván, con quien procrea dos niños, sin embargo, a su regreso a Puerto Rico por problemas de salud de Iván encontrarán en Kike una persona muy diferente.
