Buenos Aires, (EFE).- Una ex convicta acribilló a su ex pareja, una camarera de una sala de juegos de las afueras de la capital argentina, y tras permanecer atrincherada en el local durante más de tres horas fue detenida por la policía.
La tragedia, seguida minuto a minuto por los canales de televisión y las emisoras de radio de Buenos Aires, causó conmoción entre quienes se encontraban en el Bingo King de la localidad de San Fernando, a unos 25 kilómetros al norte de la capital del país.
El hecho comenzó cuando Sandra González, de 38 años, ingresó en el local e increpó a Verónica Pérez, de 24, a quien había conocido en una cárcel bonaerense mientras ambas purgaban penas por distintos delitos.
Según los investigadores, en medio de la discusión, presenciada por muchos testigos, González sacó una pistola calibre nueve milímetros y disparó cinco balazos que impactaron en el cuerpo de la empleada del bingo, quien murió en el acto.
Mientras decenas de personas gritaban y comenzaban a correr hacia las puertas de salida, González apuntó la pistola hacia su cabeza y amenazó con suicidarse en caso de que alguna persona se le acercara.
La policía rodeó la sala de juegos y especialistas en estos casos intentaron en vano durante tres horas convencer a la agresora para que se entregara a las autoridades.
En reiteradas ocasiones, según fuentes policiales, González acarició el cuerpo de su víctima y le decía: "¿Por qué me engañaste? Yo te dije que iba a pasar esto", en alusión a la nueva relación sentimental que Verónica Pérez había iniciado hace semanas con un hombre.
La policía finalmente logró atrapar a González después de una maniobra de distracción de quien oficiaba como mediador.
La víctima había purgado su condena por homicidio hace dos años, mientras que González, que recuperó su libertad hace tres meses, había recibido tres sentencias distintas por robo.