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BUENOS AIRES, ARGENTINA.- Familiares y amigos de las víctimas de un incendio en una discoteca en Buenos Aires preparaban ayer protestas en reclamo de castigos para los responsables de una de las mayores tragedias en la historia del país, que ya dejó 188 muertos según datos oficiales.
“La información oficial de la morgue judicial una vez finalizada la operatoria de autopsias, es que son 188 los cadáveres examinados por la causa”, dijo Julio Salinas, director médico del Servicio de Atención Médica de Emergencias (SAME).
De los 263 pacientes que siguen internados, 117 están en unidades de atención crítica a causa del incendio que comenzó el jueves cerca de la medianoche cuando miles de personas intentaron escapar de un denso humo que los asfixiaba, pero se toparon con que las salidas de emergencia del lugar estaban bloqueadas.
Mientras tanto, familiares y amigos de las víctimas convocaron a una protesta con cacerolas para ayer a las 2300 GMT y marchas para hoy y el jueves, con el objetivo de reclamar que se impongan castigos a los responsables de la tragedia.
El incendio empezó antes de la medianoche del jueves en una discoteca de la barriada de Once, llamada República Cromañón, cuando una goma que recubría el techo del lugar se incendió velozmente debido a la pirotecnia encendida por el público.
A causa de la tragedia, el sábado por la noche renunció el secretario de Seguridad de la ciudad de Buenos Aires, Juan Carlos López.
Ayer, López declaró a una radio que el lugar, de mil 500 metros cuadrados y situado en un lugar céntrico de la ciudad, no había sido controlado en 2004 porque cuando se hicieron los operativos de control en las discotecas, estaba cerrado.
El club nocturno tenía capacidad para mil 100 personas pero según relatos de testigos, esa noche había “miles”. Para muchos la tragedia era previsible. Una semana atrás se registró un conato de incendio en el lugar por una causa similar.
La Policía detuvo el viernes por la tarde al excéntrico empresario de rock Omar Chabán, uno de los dueños de la discoteca, quien había desaparecido tras la tragedia y ahora busca a sus socios.
También se investiga si en el baño de mujeres del lugar funcionaba una guardería improvisada, donde los padres dejaban a sus niños mientras asistían al último concierto del año de la banda de rock “Callejeros”.