Trabajadores de la Secretaría de Salud (SSA) que laboran en el programa de Oportunidades exigen que se les pague, ya que desde el inicio del presente año no han recibido remuneración alguna por las jornadas laborales que desempeñan.
Según declaraciones realizadas a El Siglo de Durango estos trabajadores de la dependencia de salud se desenvuelven en las unidades suburbanas, atendiendo a las personas de escasos recursos que están agremiadas al programa denominado ?Oportunidades?, el cual es impulsado por el Gobierno Federal.
Pero estos médicos y enfermeras se encuentran en una situación desigual a los demás asalariados. Desde hace tres años prestan sus servicios, pero aseguran que con el objetivo de que no generen antigüedad ni posibilidades de vacaciones, así como otros derechos laborales, trabajan mediante un contrato provisional de cinco meses y medio.
Cuando se cumple el plazo del contrato trabajan medio mes de manera gratuita, ya que las autoridades les piden su ?apoyo? en este sentido para posteriormente ser recontratados por un periodo similar.
Los trabajadores exteriorizan que es común que se retrasen con el pago de su salario, pero en esta ocasión el tiempo ha sido demasiado y dado que tienen familias qué mantener, la situación es insostenible.
Comentan que los tienen amagados con el argumento de que si hacen pública la situación ya no los volverán a contratar; por lo tanto, habían mantenido en secreto el problema. Sin embargo, su necesidad los orilló a manifestarse ayer en las instalaciones de los Servicios de Salud Durango (SSD) con el deseo de entrevistarse con Miguel Ángel García Ríos, responsable del programa.
Según lo establecido por los informantes, que por razones obvias decidieron guardar el anonimato, el argumento que presentan las autoridades competentes es que los recursos no han sido liberados; por lo tanto, no pueden pagarles.
Pero ellos refutan esas declaraciones, ya que de manera puntual las personas afiliadas a Oportunidades reciben el dinero que les corresponde. Así que no entienden la razón por la cual no les dan su capital si son los que brindan el servicio.
Explican que su contrato inició a partir del 16 de enero del año en curso y concluye el 30 de junio próximo. Las autoridades les anunciaron que les pagarían este 15 de mayo pero la situación cambió, y ahora será el día último del presente mes. De allí el descontento general de los duranguenses.
