Dos de los muertos son policías y el resto podrían ser residentes locales.
Moscú, (EFE).- Un total de quince personas, entre ellas once policías, tres civiles y un agente de Seguridad, murieron hoy y otras 34 resultaron heridas en un ataque terrorista en el noroeste de la separatista república rusa de Chechenia.
Entre los muertos se encuentra un niño que viajaba en bicicleta, indicó a la agencia oficial rusa Itar-Tass el primer ministro chechén, Serguéi Abrámov, quien llegó a la localidad de Známenskoye poco después de producirse el atentado.
Por su parte, el ministro del Interior de Chechenia, Ruslán Aljánov, informó de que el artefacto explosivo tenía una potencia equivalente a 8 kilogramos de trinitrotolueno.
Según las versiones preliminares del ministerio del Interior, el ataque perpetrado por la guerrilla comenzó con un tiroteo contra un todoterreno de policía desde un turismo que causó la muerte de uno de sus ocupantes del vehículo policial.
Cuando un grupo de refuerzo, integrado por efectivos de la comisaría local, se acercó al lugar del tiroteo, la calle Lesnaya, ubicada en pleno centro de Známenskoye, se produjo una potente explosión que causó nuevos muertos entre policías y civiles.
Umar Ajyádov, director de una clínica de Grozni, dijo a Interfax que en total han requerido asistencia médica 34 policías y civiles, 20 de los cuales se encuentran en estado crítico o grave.
Las autoridades pudieron auxilio a las tropas federales emplazadas en Chechenia que enviaron varios helicópteros a Známenskoye para trasladar a los heridos a hospitales en las regiones vecinas.
El presidente de la Chechenia rusa, Alú Aljánov, quien también llegó al lugar de la tragedia, responsabilizó de ese "acto terrorista" a Shamil Basáyev, el principal comandante del ala radical islámico de la guerrilla separatista.
"Los sangrientos sucesos, protagonizados por los terroristas, suscitan indignación extrema en todo el pueblo chechén", dijo el presidente chechén.
Agregó que "a Basáyev ya no le importa si mueren militares y policías o bien mujeres, ancianos y niños", en alusión a la guerra terrorista declarada por el jefe guerrillero a Rusia tras una década de la contienda en Chechenia.
Los terroristas "han desatado una guerra sangrienta contra nosotros", recalcó el líder chechén pro ruso y añadió que esa contienda "no tiene fronteras ni reglas".
El atentado en la zona chechena más tranquila se produce apenas cinco días después de que el Kremlin convocara para el próximo 27 de noviembre elecciones parlamentarias en Chechenia, como un paso más en la institucionalización de esta república, pese al rechazo frontal de la guerrilla separatista.
Las legislativas son un paso crucial en el plan político del Kremlin para devolver la normalidad al territorio, que pasa por la imposición de unas autoridades prorrusas y, en una etapa anterior, la elección de un presidente leal a Moscú.
El Kremlin sigue paso a paso ese plan, aunque los atentados terroristas y los ataques de la guerrilla no han dejado de causar bajas entre las fuerzas federales.
