Venden en 130 dólares a los machos y en 50 a las hembras a museos de Asia y Europa
AP
TUNJA, COLOMBIA.- El estudiante universitario Germán Viasus estaba investigando fórmulas para acelerar la descomposición natural de los huesos de pollo, cuando dio con lo que se convertiría en una de las exportaciones más raras de Colombia.
Viasus descubrió 56 pequeños huevos del tamaño de una perla anidados en una pila de madera podrida, mientras buscaba insectos capaces de procesar toneladas de huesos de pollo en los basureros de la nación, de una manera que resultara segura para el medio ambiente. No sabía qué iba a aparecer cuando los huevos eclosionaran, pero quedó muy atento.
?Cuidé los huevos como si fueran mis bebés?, recordó Viasus. Finalmente, uno de los cascarones se resquebrajó y de ahí salió el que se considera el samurai de los insectos: un escarabajo de apariencia feroz que es uno de los más grandes del mundo en su tipo.
Conocidos como Dynastes Hércules, estos escarabajos sólo se encuentran en Centro y Sudamérica. En su madurez, los machos pueden llegar a medir 17 centímetros, incluyendo sus cuernos ensiformes. Las hembras miden aproximadamente la mitad.
Ahora se exportan las criaturas de temible apariencia a Asia y Europa. Los escarabajos Hércules machos vivos se venden por unos 130 dólares cada uno, mientras que los especímenes muertos se venden por un poco menos. Las hembras vivas se venden entre 40 y 50 dólares y las muertas tienen menor valor.
Los insectos vivos son enviados en pequeños contenedores de plástico transparente a Japón, China y Tailandia, donde son requeridos como mascotas exóticas. Los escarabajos muertos son enviados a los museos y a científicos en Europa.
Viasus -el único exportador colombiano de escarabajos registrado- sostiene que la Ley colombiana permite exportar un máximo de 300 escarabajos vivos y 100 muertos al mes.