Advertencia|Ciudananos deben mantenerse alerta para evitar ser víctimas
EL SIGLO DE TORREÓN
La nueva modalidad es pedir dinero porque los familiares están ?detenidos? en la aduana del aeropuerto
TORREÓN, COAH.- Sandra Sosa se angustió por la llamada que recibió el martes en la tarde al teléfono particular de su casa. Era su sobrino Luis Carlos procedente de Estados Unidos, que le pedía ayuda con urgencia, ya que estaba detenido en el aeropuerto internacional Francisco Sarabia de esta ciudad y los aduanales le pedían diez mil pesos para dejarlo libre y que pasara con todo lo que traía del extranjero.
Efectivamente ella tiene un sobrino, Luis Carlos García Sosa, hijo de su hermana muy querida ya occisa y que sabe está en Estados Unidos, para el martes precisamente lo esperaba, ya que el lunes le había hablado anunciándole su llegada y que fuera a recogerlo al aeropuerto ya que le traía algunos regalitos.
Además de la llamada de su supuesto sobrino, éste le comunicó con un agente aduanal que le dio un número para que depositara el dinero, ?si es que quería ayudar a su pariente o le requisarían su equipaje y advirtió que se lo quemarían?, el tono telefónico de la llamada cortada la desesperó y sintió miedo.
Y tanto se atemorizó que empezó a pedir dinero prestado desde la noche del martes pero ayer miércoles con una de sus hijas y un amigo abogado, se decidió a presentarse en el aeropuerto a buscar a su pariente y no lo encontró, pero sí se llevó una gran sorpresa.
-Sandra Sosa y su hija Gabriela Domínguez Sosa contactaron a El Siglo de Torreón para pedir ayuda porque querían defender a su familiar, al que muy vagamente recuerdan pero les alarmó el tono de su voz. En ningún momento desconfiaron.
Entraron a la Sección de Aduana de Viajes Internacionales del Aeropuerto Francisco Sarabia y no encontraron a nadie que no fuera personal del aeropuerto, ?aquí no detenemos a nadie?, le explicó uno de los agentes y le permitieron recorrer las oficinas.
Sandra Sosa, una madre de familia y ama de casa normal, se dio cuenta, que estuvo a punto de ser víctima de extorsión telefónica y hasta ese momento se acordó de todas las recomendaciones que se hacen públicamente a través de los medios de información y que para ella hasta entonces, era meramente parte de su telenovela o de los comerciales televisivos.
Y es que afortunadamente antes de depositarlos prefirió ir al aeropuerto a ver si los que tenían a su sobrino ?le hacían una rebajita?.
Tomarán medidas de seguridad
Bandas de extorsionadores por teléfono han tomado el aeropuerto Francisco Sarabia como centro de referencia para sus operaciones ilícitas. El Consejo de Seguridad de este centro se reunirá hoy para definir estrategias a fin de incrementar las medidas de vigilancia y orientación a los ciudadanos a fin de que eviten caer en las manos de los defraudadores.
Para José Melquíades Díaz, visitador del aeropuerto Francisco Sarabia, la situación aunque tiene apenas un par de meses, ya es grave y se han percatado de ello por la cantidad de gente que acude a preguntar información sobre familiares detenidos.
Estima que se presentan a diario de uno a cinco casos y en la mayoría de ellos van a pedir informa-ción o ayuda, cuando no llegó la persona esperada, pero hasta que hicieron su depósito bancario.
Cinco, diez y hasta 50 mil pesos han sido las cantidades requeridas a personas que resultan sorprendidas en su buena fe, dice José Melquíades Díaz.
El argumento de los extorsionadores por teléfono es que el familiar de la víctima en perspectiva tiene problemas y se requiere que deposite dinero para ayudarlo.
Además de incrementar la información en las áreas generales del aeropuerto para información de viajeros y sus familiares, dice que se pondrán en coordinación con las instituciones bancarias en donde se colocarán cartulinas orientando a los ciudadanos.
Es importante recordarles que deben desconfiar de todas las llamadas que reciban pidiéndoles información sobre familiares establecidos en el extranjero o en otras ciudades de la República.
También dijo que se establecerá comunicación con la Procuraduría General de la República a fin de solicitarle cartulinas o trípticos que ayuden en la difusión de mensajes preventivos.