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LONDRES, INGLATERRA.- Las autoridades italianas extraditaron ayer al Reino Unido al ciudadano británico Hussein Osman, uno de los cuatro presuntos terroristas suicidas que efectuaron un atentado fallido, en esta capital, el pasado 21 de julio.
Osman -también conocido como Hamdi Isaac- fue detenido ayer por la tarde por oficiales antiterroristas, al bajar del avión que lo trasladaba desde el aeropuerto de Ciampino (Roma) a la base de RAF Northolt (situada al oeste de Londres).
El detenido fue trasladado ayer a la comisaría de Policía de Paddington Green, centro de Londres, donde se le acusará de forma oficial, informó un vocero de Scotland Yard (Policía británica).
Está previsto que el acusado, quien permanecerá bajo custodia policial, comparezca ante la Corte de Magistrados de Bow Street, alto tribunal de la capital, desde donde hoy será trasladado a la cárcel de máxima seguridad de Belmarsh (sureste de Londres).
Desde finales de julio, este presunto terrorista permaneció en manos de las Fuerzas de Seguridad italianas, en la prisión de Rebibbia, durante los dos meses que duró su proceso de extradición.
Según la Policía, se le acusa de conspiración para cometer asesinato, por tratar de explosionarse en un tren que circulaba por la estación del metro de Shepherd?s Bush (situada en el área oeste de la capital).
También se han presentado cargos contra él, bajo la legislación vigente en Reino Unido, relativa a la posesión de sustancias explosivas, aprobada en 1883.
Asimismo se encuentran ya bajo custodia británica los otros tres presuntos terroristas suicidas, identificados como Ibrahim Multar Said, Yassin Omar y Ramzi Mohamed.
Estos tres británicos, junto al ciudadano Manfo Kwaku Asiedu, enfrentan también a cargos por intento de asesinato y posesión de explosivos.
Los atentados fallidos del 21 de julio se produjeron tan sólo dos semanas después de que otros cuatro terroristas atentaran contra tres estaciones del Metro y un autobús de la red de transportes londinense.
Estos ataques, perpetrados el siete de julio, tuvieron como resultado 56 muertos (incluidos los cuatro suicidas) y cerca de 750 heridos.
