Londres, (EFE).- Una compañía china utiliza supuestamente para los productos de cosmética que exporta a Europa piel extraída de los cadáveres de presos ejecutados en aquel país, según denuncia el diario británico "The Guardian".
Un agente de esa empresa, que, según el periódico, no puede identificarse por razones legales, han informado a sus potenciales clientes europeos de que está desarrollando colágeno para el tratamiento de labios y anti-arrugas a base de piel de presos fusilados.
Según el agente, el empleo de piel de condenados a muerte es "tradicional" y no tiene por qué escandalizar, dice el periódico.
China ejecutó el año pasado a tres mil 400 personas, según denuncia de Amnistía Internacional.
Dado que no son previsibles hasta dentro de varios años leyes europeas que controlen el tratamiento a base de colágeno, médicos y políticos británicos advierten del peligro que corren los consumidores de ese tipo de productos.
Los diputados del comité de Sanidad de la Cámara de los Comunes va a estudiar el tema y podría lanzar una investigación, según su presidente, el diputado laborista Kevin Barron.
Los cirujanos plásticos están a su vez preocupados por el retraso en la aprobación de leyes que regulen el sector de tratamientos cosméticos.
El agente de la compañía china a la que se refiere la información de "The Guardian" admitió la utilización de piel de ejecutados en una entrevista con uno de sus reporteros que se hizo pasar por hombre de negocios de Hong Kong.
"Todavía llevamos a cabo muchas investigaciones al modo tradicional, utilizando piel de presos ejecutados o fetos de abortos", explicó aquél.
Ese material es comprado por compañías de biotecnología con sede en la provincia norteña de Heilongjiang y se desarrolla en otros lugares del país.
El agente señaló al reportero que en China se considera muy normal" la utilización de esos tejidos humanos, por lo que dijo no entender que esas prácticas pudieran escandalizar en occidente.
Según ese agente, su compañía exporta a los países occidentales a través de Hong Kong: "Apenas comenzamos a exportar esos productos, y nuestros clientes extranjeros se extrañan de que China pueda fabricar colágeno humano a un cinco por ciento de lo que cuesta en Occidente".
La piel de los prisioneros ejecutados solía ser incluso más barata antes, ya que ahora "hay que pagar una tasa al tribunal" que los condenó a muerte, explicó el representante de la empresa china.
Varios cirujanos plásticos dijeron al periódico británico que desde hace años venían circulando rumores sobre el empleo en los productos de belleza de tejido humano obtenido de cadáveres de presos.
Peter Butler, asesor para temas de cirugía plástica del gobierno de Londres, informó de la existencia de rumores según los cuales varios cirujanos chinos habían llevado a cabo trasplantes de manos utilizando las de presos ejecutados.
Un centro de trasplantes se encuentra al parecer en terrenos inmediatamente próximos a un lugar donde se fusila a los presos.
Las autoridades chinas niegan, por su parte, que se utilicen órganos del cuerpo de los presos sin consentimiento oficial aunque los testimonios de algunos científicos de ese país que se pasaron a Occidente parecen indicar que existen tales prácticas.