EFE
RÍO DE JANEIRO, BRASIL.- Dos brotes de rabia humana transmitidos por murciélagos hematófagos han causado la muerte de al menos 21 personas entre junio y octubre en el estado brasileño de Marañón, confirmaron ayer las autoridades sanitarias.
En lo que va de octubre han muerto catorce personas, la última un joven de 13 años que pereció el miércoles, dijo Henrique Jorge, superintendente de Epidemiología de Marañón, estado que ha declarado once municipios en emergencia.
?Tenemos un niño con síntomas y es posible que haya otros casos?, dijo Jorge en entrevista telefónica.
Las víctimas mortales vivían en áreas apartadas del litoral de Marañón y medios locales han denunciado que la atención médica les llegó con retraso.
El virus de la rabia ataca el sistema nervioso y una vez que se desarrolla en el organismo es casi imposible evitar la muerte de los enfermos.
El primer brote de la enfermedad dejó siete muertos entre junio y julio en los municipios de Carupatera, Cándido Mendes y Godofredo Vianna, en el nordeste del estado, mientras que el segundo fue detectado en el municipio de Turiazu, a unos 320 kilómetros al noroeste de la capital estatal San Luis y cerca de la frontera con el estado amazónico de Pará, explicó el funcionario.
?En el municipio de Turiazu, sigue activo y ya van 14 muertos, por lo que los dos focos suman 21?, dijo Jorge.
En el estado de Pará la rabia humana mató a 13 personas en junio pasado y 21 en 2004. Los casos de rabia en la Amazonía brasileña están asociados a la destrucción del medio ambiente para la explotación de madera, la agricultura y la ganadería, señalan los expertos.
?Es un caso de desequilibrio ambiental. El virus de la rabia actúa en los murciélagos como un mecanismo de selección natural, y como la población de esos animales ha aumentado, sus colonias se han dispersado a áreas más extensas?, explicó.
La ganadería extensiva en Marañón, además de destruir ecosistemas selváticos, proporciona una ?gran oferta? de sangre a estos murciélagos, explicó Jorge.
La destrucción de los manglares, que han sido sustituidos por cultivos de arroz, también ha desplazado a los murciélagos de su hábitat, explicó.
Las autoridades de Marañón señalaron que han iniciado una campaña masiva de vacunación en los municipios en emergencia.
