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México, DF.- La actriz y cantante mexicana Lucía Méndez confesó que en sus tiempos de gloria vivió una de sus más terribles depresiones al estar rodeada de fama, dinero, pretendientes y con ofertas exclusivas por doquier, pero vacía por dentro lo cual, sostiene: ?me hizo muy infeliz?.
?Fue en la época donde empezaban a reconocerme a nivel internacional, vinieron muchos años de grandes éxitos, de contratos por todos lados, de estar en los primeros sitios de popularidad en la música, pero siempre tenía mucha ansiedad?, reconoció.
En entrevista admitió que en ese tiempo, precisamente a finales de la década de los 70 y durante los 80, cuando el éxito se había plasmado sobre ella, cuando las marquesinas de cine, telenovelas y de música anunciaban su trabajo con bombos y platillos: ?Nunca llegué a tener la felicidad completa aunque parecía que sí?.
?Es difícil de entender porque lo tenía todo, pero a la vez no tenía nada, era horrible, me sentía muy vacía. Nunca faltaron los pretendientes, pero no me gustaba nadie, no le aguantaba nada a nadie y eso no era la vida?, declaró.
Por ende, relató la artista de 49 años, le sobrevinieron sentimientos de soberbia. Sin embargo, relató: ?Se acabó la oscuridad. Ahora estoy satisfecha conmigo misma y todo gracias a un sacerdote que me hizo cambiar en muchas cosas; tengo la felicidad espiritual que necesitaba?.
?Años atrás sí hubo momentos en que fui feliz, pero no tanto como ahora, no con tanta plenitud. Claro que son etapas que cualquier persona vive y que se deben superar, pero si no se tiene acercamiento a la fe estás perdido?, comentó.
Lucía Méndez dice que no es necesario el fanatismo ni cargar el rosario para rezarlo todos los días y estar bien con Dios. ?Sólo se necesita acercarse a la luz. Si leemos revistas o periódicos, también hay que leer la Biblia porque si eres católico es muy interesante leer el libro más importante de la vida?.
La felicidad de la cantante, famosa también por su trabajo en telenovelas como Viviana (1978), Colorina (1981) y El Extraño Retorno de Diana Salazar (1988), entre otras, se ampliará el próximo año cuando contraiga nupcias por la religión católica con el empresario Arturo Jordán, con quien se unió en matrimonio en febrero de 2004 pero por las leyes cristianas.
?Me caso por la iglesia católica, dejé el cristianismo porque tuve una decepción de mi pastor y fue entonces cuando encontré en mi vida a José López, un sacerdote maravilloso, sencillo, humilde y que es muy sabio y divertido?, comentó.
La intérprete de temas como Enamorada y Corazón de Piedra, informó que se casará en México con Jordán mediante una fastuosa ceremonia, una vez que le presenten la anulación de su anterior matrimonio.
?Encontré a un hombre con quien comparto un espíritu muy afín, siempre estamos de acuerdo en muchas cosas?, concluyó.
