Los padres de Menezes se reunirán con la Comisión Independiente de Quejas a la Policía que espera concluir su investigación a finales de año.
Londres, (EFE).- La familia del brasileño Jean Charles de Menezes, muerto el pasado julio por policías que lo confundieron con un terrorista, visitó hoy, visiblemente emocionada, la estación de metro londinense en la que el joven fue abatido.
Los padres de Menezes, Matozinhos Otone Da Silva y María Otone de Menezes, no pudieron contener las lágrimas al llegar al piso en el que vivía su hijo en Tulse Hill, en el sur de la capital británica.
Acompañados por otros cinco familiares, los progenitores visitaron el piso antes de recorrer el camino que anduvo Menezes el pasado 22 de julio hasta llegar a la estación de metro de Stockwell, en el sur de Londres.
En ese lugar, el brasileño, de 27 años y electricista de profesión, recibió siete disparos en la cabeza de agentes que lo tomaron por uno de los autores de los atentados fallidos contra la red de transporte público londinense del pasado 21 de julio.
La familia, que esta tarde tiene previsto dar una rueda de prensa, llegó poco después de las 11:00 GMT al lugar del suceso, donde se congregó una multitud formada por periodistas, curiosos y agentes de policía.
Los padres, junto a Giovani, uno de los hermanos de Menezes, entre otros familiares, pudieron ver las numerosas notas de afecto y flores colocadas en la estación en recuerdo de su hijo, al tiempo que conocieron a tenderos y residentes de la zona.
"¿Por qué han matado a mi hijo?", gritó la madre, con lágrimas en los ojos, al depositar un ramo de margaritas antes de entrar en la estación, que fue cerrada al público para permitir que la familia accediese al andén en el que el electricista fue tiroteado.
Anteriormente, María Otone de Menezes reiteró, en declaraciones a la BBC, que el comisario jefe de Scotland Yard, Ian Blair, "fracasó en el cumplimiento de su deber" y "tiene que dimitir".
De hecho, los parientes del fallecido se han negado a reunirse con Ian Blair, quien dijo en su momento que el tiroteo estaba "directamente" relacionado con la investigación de los ataques fallidos del 22 de julio.
La madre, que describió a su hijo como "un muchacho trabajador", afirmó que los agentes "tuvieron tiempo para identificar" a Menezes y agregó: "Ellos (los policías) destruyeron su vida y, al mismo tiempo, destruyeron la mía".
Los familiares recibieron muestras de apoyo de los numerosos curiosos que se acercaron a la estación de Stockwell, como Abdul Chaowdhury, oriundo de Bangladesh, quien dijo a EFE que "es un momento muy triste y difícil para la familia".
Los familiares comenzaron ayer, martes, una visita al Reino Unido cuyos gastos corren a cargo Scotland Yard, el departamento de investigación criminal de la Policía Metropolitana de Londres.
Su llegada coincidió con la publicación de una información del vespertino londinense "Evening Standard" que aseguraba que una "confusión total" entre los mandos de la policía británica precedió a la muerte de Menezes a manos de varios agentes que no lograron identificarle antes de dispararle a bocajarro.
Según fuentes consultadas por el vespertino, a Scotland Yard sólo le hicieron falta pocas horas para darse cuenta de que el brasileño no era un terrorista, pese a que el comisario Ian Blair ha defendido hasta ahora que se percataron del error al día siguiente del suceso.
La Comisión Independiente de Quejas a la Policía, encargada de investigar el trágico error, será quien determine hasta qué punto se equivocó la Policía y sobre quién deben recaer responsabilidades.
La familia de Jean Charles de Menezes tiene previsto reunirse mañana, jueves, con miembros de la Comisión, que espera concluir su investigación a finales de año.
