Asegura la ONU que los crímenes en el país y Centroamérica tienen patrones similares
EFE
MÉXICO, DF.- Los asesinatos de mujeres ocurridos en los últimos años en México y en países de Centroamérica, especialmente en Guatemala, tienen patrones similares y ?no pueden considerarse hechos aislados o de carácter interno?, afirmó ayer en Ginebra una experta de las Naciones Unidas.
La relatora de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre la Violencia contra la Mujer, Yakin Erturk, consideró que se ha dado demasiada preeminencia a los crímenes ocurridos en Ciudad Juárez, a pesar de que también en otras zonas de México se han registrado hechos similares.
Indicó que en los últimos tres años se han producido mil asesinatos de mujeres en el sur del país, ?que no han atraído la atención de la comunidad internacional?, mientras que en Guatemala el número de víctimas no ha parado de aumentar.
En menor medida, El Salvador, Honduras y Nicaragua también sufren de ese fenómeno criminal.
?No estoy convencida de que se trate sólo de hechos internos y esporádicos como lo pretenden algunos gobiernos?, señaló Erturk, tras presentar su informe anual ante la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, reunida en Ginebra, Suiza.
La experta, de nacionalidad turca, dijo que espera que la Procuraduría General de México le remita próximamente información detallada sobre los crímenes en el país para confrontarla con la que ha recogido en sus recientes visitas a Guatemala y El Salvador.
Sobre la situación en México, la senadora del Partido Revolucionario Institucional (PRI) Lucero Saldaña declaró en una rueda de prensa en Ginebra que, ?aunque Ciudad Juárez es el paradigma de esta situación?, también se da ese tipo de violencia contra las mujeres en otras ciudades del país como: Chiapas, Cancún, el Distrito Federal y Morelos.
Por otro lado, Erturk dedicó su informe general a la Comisión a la vinculación entre la violencia contra la mujer y el Sida, llegando a la conclusión de que los programas para prevenir esa enfermedad ?no tendrán éxito sin un cambio de las relaciones desiguales de poder entre hombres y mujeres?.
Sostuvo que la subordinación femenina al hombre en muchas sociedades expone a las mujeres a la violencia y limita sus derechos sexuales y reproductivos, lo que aumenta el riesgo de que contraigan el sida.
Por esta razón, la relatora recomendó a los gobiernos definir en sus legislaciones la ?violación marital? como un crimen, elevar la edad legal para el matrimonio, sancionar los enlaces forzados y tomar medidas más severas contra el tráfico de personas con fines de explotación sexual.
Admitió que muchas sociedades son reacias a aceptar la existencia de la violación dentro del matrimonio y señaló que ?por eso no sólo es necesario cambiar las leyes sino también las mentalidades?.
?La manera de pensar de las personas debe conformarse a lo que las leyes establecen y no buscar justificaciones en la cultura y la la tradición?, agregó.
Erturk sostuvo que diversas investigaciones indican que entre el 50 y 60 por ciento de las mujeres que padecen actualmente de Sida en el mundo contrajeron ese mal de su pareja estable.
?La permisividad en la sexualidad masculina es el mayor problema?, declaró la experta de la ONU, quien explicó que en ese contexto los hombres se niegan a utilizar preservativos y presionan a las mujeres a mantener relaciones sexuales inseguras.
