AGENCIAS
BOGOTÁ, COLOMBIA.- Un avión comercial con 25 ocupantes a bordo fue secuestrado ayer por dos desconocidos mientras volaba en el suroeste de Colombia, informaron varias emisoras locales.
La cadena Caracol Radio, que citó fuentes oficiales, indicó que la aeronave, perteneciente a la empresa Aerovías de Integración Regional (Aires), fue secuestrado mientras volaba entre Florencia y Neiva, 400 kilómetros al suroeste de Bogotá.
La aeronave tiene la matrícula colombiana HK-4030 y en la que viajaban varios políticos, fue desviada a Bogotá, donde aterrizó sin ningún contratiempo. En febrero de 2002 guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) secuestraron un avión de la misma empresa en Neiva (capital del Huila) en el que viajaban, entre otros pasajeros, el congresista Jorge Eduardo Gechem, quien sigue cautivo.
Los dos secuestradores, un hombre inválido y su hijo, pidieron dialogar con miembros de la Iglesia Católica colombiana, la Fiscalía y la Defensoría del Pueblo. Luego de esto, liberaron a nueve de los pasajeros, todos ellos mujeres y niños.
El hombre en silla de ruedas no fue requisado al subir al avión en Florencia, capital del sureño departamento de Caquetá, lo cual le permitió ingresar dos granadas de combate, con las cuales, y con ayuda de su hijo, sometió a la tripulación y a los pasajeros.
Hasta ahora, lo que se conoce es que el principal secuestrador, Porfirio Ramírez, reclama una indemnización del Gobierno por el estado de discapacidad en que quedó luego de un incidente cuando era miembro de la Policía Nacional.
La Comisión, de la cual hacen parte el Defensor del Pueblo de Colombia, Volmar Pérez y el diputado opositor, Gustavo Petro, entablaron contacto con los secuestradores, sin detallar el acuerdo al que se llegó. Más tarde, el resto de los rehenes que permanecían en el interior del avión fueron liberados y se esperaba la salida de los dos secuestradores y los miembros de la comisión negociadora.
Poco antes de que abandonaran los 11 pasajeros que quedaban dentro del aparato, fue sacada de la bodega de carga de la aeronave una silla de ruedas, presuntamente para el secuestrador, que reclama una indemnización del Estado.
