El convenio fortalecerá las bases para el desarrollo sectorial
AGENCIAS
DAVOS, SUIZA.-Los gobiernos de México y Nueva Zelanda firmaron ayer un acuerdo para impulsar sus relaciones comerciales y económicas así como las inversiones entre ambos países, orientado básicamente a impulsar la producción de leche.
La firma del convenio estuvo a cargo del secretario mexicano de Economía, Fernando Canales, y el ministro de Agricultura y Negociaciones Comerciales de Nueva Zelanda, Jim Sutton.
De acuerdo con el funcionario mexicano el convenio, que no tiene por objetivo derivar en un tratado de libre comercio, establece la creación de grupo de expertos que estudiará "formas para reforzar las relaciones económicas, comerciales y las inversiones bilaterales".
El grupo estará integrado por expertos de ambos países procedentes del mundo académico, de los negocios y del Gobierno y se reunirá, al menos, una vez en México y otra en Nueva Zelanda.
Los especialistas "analizarán las oportunidades que tienen las dos naciones en las distintas áreas como es el caso del sector lechero para incrementar sus negocios" y redactarán un reporte al término de su misión.
Canales indicó que México busca atraer, entre otras, inversiones de alguna compañía lechera neozelandesa que se establezca en el país para "incrementar la producción láctea y llegar a la autosuficiencia" del sector, que no cuenta con una oferta apropiada en México.
"Uno objetivo fundamental para nosotros es tener una inversión de Nueva Zelanda en nuestro país para la producción de leche y la industrialización de la misma", precisó.
"Queremos aprovechar el expertise (experiencia) en materia agropecuaria en particular en este tema de aquel país", dijo Canales en declaraciones a la prensa mexicana.
"Más que importar en este sector queremos producir nosotros" precisó Canales, quien calificó a Nueva Zelanda como "un país pequeño, pero que se ha abierto al mundo y está muy modernizado".
El convenio no supone la eliminación de ningún tipo de arancel entre ambos países y ha sido firmado en el marco de la celebración del Foro Económico Mundial, que inició la víspera en esta ciudad.
Por su parte, el ministro neozelandés de Agricultura señaló que su país está interesado en comerciar con México por, entre otros factores, las relaciones comerciales privilegiadas que el país latinoamericano tiene con Estados Unidos.
Sutton precisó que Nueva Zelanda está interesada en aprovechar el convenio en sectores como la electrónica, la electricidad y el automotriz, ramos "en los que no somos competitivos porque estamos aislados".
De acuerdo con reportes de Canales, el intercambio comercial entre México y Nueva Zelandia se fija en la actualidad una cantidad "pequeña" de 450 millones de dólares, con una balanza positiva para México.
México importa fundamentalmente de Nueva Zelanda productos forestales y leche en polvo.
Plan emergente para África
El primer ministro británico, Tony Blair, apoyado por el magnate Bill Gates y la estrella de rock Bono, afirmó ayer que 2005 es un año crucial para África, y que ése será uno de los asuntos centrales de la próxima cumbre del Grupo de los Ocho (G-8).
Mientras, los presidentes de Sudáfrica, Thabo Mbeki, y de Nigeria, Olusegun Obasanjo, afirmaron que tener paz y estabilidad en África es un requisito vital para el desarrollo del continente y para lograrlo pidieron la cooperación de los países más ricos, reunidos en el G-8.
A ese respecto el ex presidente de Estados Unidos Bill Clinton señaló que hay 13 millones de africanos que necesitan tratarse con antirretrovirales, pero sólo 300 mil lo consiguieron en 2004.
Blair, que este año preside el G-8, ha incluido los problemas de África y sus propuestas sobre los "mecanismos prácticos" para resolverlos en la agenda de la cumbre prevista para julio próximo con los jefes de Estado o de Gobierno de esos países.
"La prioridad para África es la paz y la seguridad. Sin ellas no se puede avanzar en otros aspectos. Ellas nos permitirán tratar las injusticias existentes y sólo a través de ellas se puede lograr un buen Gobierno", agregó el presidente nigeriano, Olusegun Obasanjo.
Subrayó, además, que África "no recibe suficiente masa crítica de recursos para crear cambios y que el desarrollo se convierta en una realidad", en referencia a que el flujo de ayuda internacional llega al continente en caso de desastre natural o crisis humana.
"Hay que convertir el esfuerzo desplegado en el caso del maremoto asiático en un esfuerzo más global", dijo Clinton que ante las preguntas de por qué la Administración de Estados Unidos no aumenta su ayuda al desarrollo internacional, al que dedica el 0.1 por ciento de su PIB. El presidente del imperio informático Microsoft, Bill Gates, se refirió a que la imagen de la ayuda "es a veces bastante negativa", pues se confunde con la caridad, y en otras muchas hay preocupación de los donantes por que no sea absorbida por la corrupción.
Gates ha donado a Africa 750 millones de dólares, una cantidad que supera el presupuesto de asistencia al desarrollo de muchos países.
El rockero Bono, líder del grupo musical U2, más radical que sus compañeros de debate y menos políticamente correcto, señaló que de manera general "el tono del debate" le preocupa porque "se habla razonablemente de situaciones que no tienen razón de ser".
